Todo sigue igual entre Renfe y el catalán
Intento obtener información y hacer una reserva de tren para un viaje Barcelona-París. Las guías de la ciudad e Internet me conducen a un solo número 902, donde deben confluir la sabiduría de horarios, precios y lugares posibles de venta de la Red Nacional de Ferrocarriles Españoles. Me atiende una amable operadora que me asegura que es imposible dirigirse en catalán ya que es un teléfono de atención nacional. Rabioso por la respuesta le pregunto por el protocolo existente si hablo en inglés o francés. En este caso, afirma, no habría ningún problema ya que ella misma me pasaría la llamada al operador que me atendería. Acabo la conversación convencido de que todo sigue igual en Renfe.
Por si acaso, llamo en Barcelona a un teléfono de cercanías por si puedo obtener por vía colateral otra referencia, aunque dudo en obtener una respuesta seria, más allá del teléfono directo de algún funcionario voluntarista de la estación de Sants.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.