Detenidos cuatro policías locales de Marbella tras morir un hombre cuando era arrestado
Algunos testigos del suceso increparon a los agentes por la contundencia de su actuación
Un varón de unos 40 años e identidad desconocida falleció ayer en Marbella (Málaga) mientras era detenido con gran contundencia por cuatro policías locales ante la mirada de una veintena de viandantes, que recriminaron a los agentes por su forma de actuar. Los agentes municipales y dos particulares que les ayudaron fueron detenidos luego por miembros del Cuerpo Nacional de Policía y se prevé que pasen hoy a disposición judicial. El fallecido, posiblemente de nacionalidad británica y bastante corpulento, volvía de la playa, en estado de embriaguez, y había increpado a varios paseantes.
Los hechos ocurrieron sobre las 14.30 en la confluencia de las calles Camilo José Cela y Gregorio Marañón, en el centro de la localidad. Según el responsable de la Policía Local, Rafael del Pozo, en la jefatura se recibieron dos llamadas en las que se alertaba de la presencia de un hombre "semidesnudo e insultando a la gente a su paso". Según fuentes de la investigación, dos agentes municipales que patrullaban la zona acudieron al lugar y solicitaron la documentación al fallecido, que iba vestido únicamente con un pantalón de pijama.
Al parecer, el interpelado hizo caso omiso de la petición de los agentes, que lo agarraron. En ese momento, comenzó un violento forcejeo, ya que el fallecido -de no mucha estatura pero bastante fuerte- opuso una gran resistencia. Los agentes, ayudados incluso por personas de paisano, luego detenidas, lograron tirar al hombre al suelo y ponerle las esposas. Una vez en el suelo, y siempre según fuentes cercanas al caso, los agentes dieron varios golpes al arrestado con sus defensas (porras) de goma. Algunos de los testigos manifestaron que uno de los agentes golpeó al detenido contra un poste y contra un coche, sin que él tuviera una actitud violenta, informa Efe.
A los pocos minutos, otra pareja más de agentes de la Policía Local apareció en el lugar de los hechos, y uno de ellos le puso la rodilla en el cuello y se lo apretó fuertemente contra el suelo, de acuerdo con la versión de estos testigos. Todo ello sucedió mientras los viandantes afeaban a los agentes su dura actuación. Al poco tiempo, los policías observaron que el detenido empezaba a hacer gestos extraños con los ojos y cambiaba de color. En ese momento llamaron a una ambulancia, pero los sanitarios no pudieron más que certificar la muerte del hombre, que sufrió una parada cardiorrespiratoria. El juez ordenó con bastante rapidez el levantamiento del cadáver y encargó al Cuerpo Nacional de Policía la detención de los agentes municipales para la apertura de diligencias y su posterior paso a disposición judicial.
Los agentes han sido separados del servicio "de forma preventiva", según Del Pozo. El cadáver del detenido ha sido trasladado al Instituto de Medicina Legal de Málaga, donde se le practicará la autopsia hoy por la mañana. El Ayuntamiento de Marbella pidió ayer "prudencia y cautela para no llegar a conclusiones precipitadas, que no se ajusten a la realidad" en relación con fallecimiento.
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