La Junta extingue el plan industrial de la N-IV que sirvió para amortiguar la crisis de Santana

La Junta ha dado oficialmente por finalizado el Plan de Reindustrialización del eje de la N-IV en Jaén, que nació hace una década para amortiguar la crisis surgida tras la suspensión de pagos en la empresa automovilística Santana Motor de Linares. Tras haber concedido más de 101 millones de euros a más de 500 empresas, la Junta, que había anunciado hace poco la ampliación del plan, justifica ahora su extinción en que se han cumplido los objetivos. Los agentes sociales lamentan, en cambio, su desaparición y piden un instrumento similar de ayuda.

Desde su puesta en marcha en 1995, el Plan de Reindustrialización de la N-IV, que ha beneficiado a los municipios jiennenses de Linares, Bailén, Andújar, La Carolina y Guarromán, ha tramitado 514 expedientes de empresas, de las que están en vigor 488. La inversión aprobada ha superado los 374,8 millones de euros, lo que ha permitido la creación de 4.492 empleos y el mantenimiento de otros 7.512, todo ello con una inyección económica en ayudas por parte del Gobierno andaluz de más de 101 millones de euros. Unas cifras que, en palabras del delegado del Gobierno andaluz en Jaén, Francisco Reyes, han superado en un 400% los objetivos marcados hace una década. "El plan nació con vocación de cuatro años y se prorrogó hasta 2001 y después hasta 2005", recordó Reyes. No obstante, hace apenas un año la Junta había anunciado a los alcaldes la prórroga de este plan y su ampliación a otros municipios de la comarca, algo que finalmente no se ha producido.

"La situación inicial, con la crisis de Santana Motor, no tiene nada que ver con el momento actual", justifica Francisco Reyes. A partir de ahora, las empresas de este eje industrial, al igual que las del resto del territorio jiennense podrán acogerse al decreto de incentivos aprobado por la Consejería de Empresa y que, en el caso de Jaén, contará con una bonificación adicional de cinco puntos porcentuales de los incentivos regionales dispuestos para el resto de la comunidad.

Se trata de una medida prevista en el plan Jaén XXI, aprobado hace dos semanas por el Consejo de Ministros para dinamizar y diversificar la economía jiennense.

El secretario de la Federación de Empresarios del Metal, Ramón Calatayud, valora el "papel importantísimo" que ha jugado este plan. Por eso lamenta su desaparición y cree que será necesario un instrumento similar que extienda su ámbito de actuación al eje Linares-Jaén-Martos. "El plan Jaén XXI debe apostar por la diversificación industrial de la provincia porque hay muchos sectores en riesgo debido a la deslocalización de las empresas, como es el caso de Valeo, en Martos", apunta Calatayud, que considera "insuficiente" el 5% de incentivos regionales.

El representante de CC OO en la comisión de seguimiento del plan, Juan Salazar, dice, que "ha sido muy válido para crear y mantener el empleo en la comarca". A su juicio, la línea de incentivos regionales que ahora ofrece la Administración "va a repercutir negativamente" en la inversión y en el empleo porque se trata, asegura, de un mecanismo "muy restrictivo y muy específico".

De los 514 expedientes de ayudas tramitados por el Plan de Reindustrialización de la N-IV desde su aprobación, 137 corresponden a empresas de La Carolina, 128 de Bailén, 121 de Linares, 85 de Andújar y 17 de Guarromán. Por modalidad, 279 han sido para la ampliación de empresas, 145 para nueva creación, 61 de modernización y sólo 3 proyectos de I+D+I. Por sectores productivo, la mayor parte de los expedientes se refieren a empresas del sector cerámico (97), seguido de las industrias auxiliares de la automoción (74) y de la madera (57). La mayoría de los proyectos subvencionados eran de menos de 300.000 euros, seguidos de los comprendidos entre 600.000 y 3 millones de euros, que también han sido los que más empleo han generado (1.031).