El Gobierno andaluz dice que no habrá retrasos y cree "inaceptable" condicionar la reforma a otros textos

A través del portavoz, el Gobierno andaluz quiso ayer dejar su posición clara: no habrá retrasos en el calendario, el Estatuto andaluz se aprobará en esta legislatura y no va a depender en ningún momento de lo que se decida en la mesa de negociación de otro Estatuto. El Ejecutivo autonómico también quiso expresar que seguirá poniendo su máximo empeño en alcanzar el consenso entre todos los partidos, para lo que no escamoteará ningún esfuerzo, a la vez que mostró su convicción de que el Estatuto saldrá con el apoyo de todos.

En la conferencia posterior a la reunión del Consejo de Gobierno, el portavoz, Enrique Cervera, aprovechó para hacer una declaración política de la marcha de la ponencia del Estatuto. Dijo estar seguro de que el PA, pese a "fuegos de artificios y errores clamorosos", estará en el acuerdo final porque resulta "inimaginable" que un partido que se llama nacionalista y progresista se quede fuera de una reforma que indudablemente avanza mucho en el autogobierno. "Nadie entendería que el PA repitiera 25 años después la escena del sofá entre Rojas-Marcos [Alejandro] y Martín Villa [Rodolfo]".

Cervera también censuró que los andalucistas hayan decidido, a su juicio, alinearse con "quienes nunca han ocultado su interés por hacer embarrancar la reforma del Estatuto, abrazarse a quienes aparecen tener siempre en la punta de la lengua aquello de 'andaluz este no es tu referéndum", en referencia el PP. El portavoz tildó igualmente de inaceptable que se haga depender el Estatuto andaluz de cualquier otro Estatuto, y dijo que los límites de la norma andaluza no los pone ni Pascual Maragall ni Josep Carod-Rovira, sino la Constitución española. En este sentido, Enrique Cervera afirmó también que ningún Estatuto obtendrá privilegios, y expresó su confianza tanto en el Gobierno español como en las Cortes Generales de que todos se reformen conforme al espíritu de la Constitución.

Cumbre sin fecha

Respecto a la reunión que anunció el presidente de la Junta, Manuel Chaves, con los líderes políticos para impulsar la reforma, el portavoz señaló que el presidente mantiene su compromiso, aunque se producirá en el momento que se considere más idóneo y eficaz para conseguir un "magnífico Estatuto".

Por su parte, el presidente del PP, Javier Arenas, reiteró ayer en Córdoba que "Andalucía no necesita un nuevo Estatuto" y respaldó el criterio de su partido de que la negociación del Estatuto catalán afecta a la reforma de Andalucía, motivo por el que justificó la salida de los trabajos de la ponencia, informa M. Planelles. Para Arenas, la introducción del término nación en el Estatuto catalán tendría consecuencias jurídicas, sociales, políticas y económicas, y afecta "al proyecto de concordia de la Constitución", al tiempo que "también nos afecta en los derechos individuales", ante la "obligación" de conocer el catalán para trabajar en aquella comunidad", según el líder del PP.