El Gobierno se abre a la financiación de San Telmo

El alcalde de San Sebastián, el socialista Odón Elorza, no pierde ocasión de reclamar al Gobierno vasco que se implique en la financiación de las obras de remodelación del Museo San Telmo y del Teatro Victoria Eugenia. Sus peticiones parece que van surtiendo efecto. El acuerdo presupuestario que rubricaron en diciembre el Ejecutivo y el PSE incluye, a petición de los socialistas, una partida de un millón de euros para San Telmo, repartido entre este año y el próximo ejercicio, recordó ayer Elorza.

Con esta partida sobre la mesa, el primer edil aprovechó la reunión que mantuvo el martes con la consejera de Cultura, Miren Azkarate, para abrir con el Gobierno "una vía de diálogo y negociación", que "podría permitir" ampliar dicha aportación a partir de 2007.

Nieto Sobejano Arquitectos, el estudio madrileño que ganó el concurso para reformar el museo, tiene previsto entregar el proyecto básico la semana entrante, según precisó Elorza. Las obras, que una vez adjudicadas durarán al menos hasta 2009, tendrán un coste cifrado en unos 24 millones de euros. El Ayuntamiento desembolsará en principio el grueso de esta cantidad, aunque el Ministerio de Cultura ya se ha comprometido a aportar ocho millones.

Azkarate y Elorza se reunieron en realidad para tratar el futuro de la antigua fábrica de gas de la ciudad, donde se construirá el nuevo colegio del centro Amara Berri en el barrio de Morlans. El edificio central de la vieja factoría y su gasómetro están protegidos por el Gobierno vasco como patrimonio industrial. El alcalde aboga por mover el gasómetro unos 50 metros de su presente ubicación y por trasladar el edificio catalogado a la zona de Miramón, como en su día se hizo con las Torres de Arbide, situadas en su origen en el centro de la capital.

La consejería de Cultura se ha comprometido a realizar un informe jurídico para analizar la posibilidad de modificar el decreto actual de protección, que establece que tanto el edificio como el gasomotor han de permanecer en su actual lugar, según indicó Elorza. Sin embargo, no ha garantizado que el posible cambio esté en la línea de lo pedido por el primer edil.