Aguirre afirma su compromiso de defender la libertad de opinión

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, se mostró decidida en su discurso de fin de año a "defender la libertad, empezando por la libertad de opinar y de informar". Y precisó: "Es el primer deber de todos los que queremos que la nuestra sea una democracia viva y profunda". Según la presidenta, la libertad es la base sobre la que debe construirse el progreso.

En su mensaje de Navidad y de Año Nuevo, Esperanza Aguirre aseguró que su principal deseo para 2006 es que "las oportunidades de prosperar" lleguen a todos los madrileños, que, según dijo, forman "una especie de familia" donde "es mucho más" lo que les une que lo que les separa.

Una "familia" en la que, según la presidenta, "como es lógico no faltan los problemas" y su solución pasa, apuntó, porque todos ejerzan "la generosidad", comenzando por los que ostentan "la representación política", agregó.

"Los políticos debemos buscar siempre soluciones a los problemas de los ciudadanos y nunca utilizar la representación que esos mismos ciudadanos nos han otorgado para crearles problemas", añadió en su mensaje la presidenta.

"Deseo, además que la libertad continúe en el centro de nuestra vida política social y cultural", prosiguió, y que sea la base sobre la que construir el progreso material, económico, cultural e intelectual.

También expresó su deseo de que la Comunidad sea en 2006 un lugar "en el que reine la libertad", donde se impulse el "progreso" y la "solidaridad" y donde los problemas se resuelvan con generosidad.

Aguirre hizo un llamamiento a la solidaridad de los madrileños con los colectivos más necesitados de la región y tuvo un recuerdo especial para los enfermos y sus familias, las personas mayores, los discapacitados, los que no tienen trabajo y los inmigrantes, de quienes manifestó que "ayudan a crecer" a la región y hacen que Madrid sea "más grande y más rico".

A todos ellos, y a quienes "tienen problemas para aprovechar las oportunidades de la Comunidad de Madrid", la presidenta les dedicó en su mensaje "palabras de especial afecto" y a los madrileños en general, les deseó que en 2006 sean "capaces de utilizar nuestra libertad de la manera más creativa y más solidaria posible".

La presidenta concluyó su discurso deseando que "por encima de las enriquecedoras diferencias que tenemos, todos los madrileños seamos capaces de utilizar nuestra libertad de la manera más creativa y solidaria posible".