El año del carné por puntos

Dentro de seis meses comenzará una nueva era en las carreteras. Con la puesta en marcha del carné por puntos se iniciará una persecución sin tregua de los conductores que reiteradamente conducen a 170 kilómetros por hora, no respetan las señales o hacen adelantamientos peligrosos. "En definitiva, a partir de la implantación del permiso por puntos, vamos a conducir mejor", según subraya la Dirección General de Tráfico en la campaña de comunicación para dar a conocer la nueva licencia que echará a andar este mes.

La filosofía del nuevo sistema es que habrá que ganarse día a día, con una actitud responsable, la posibilidad de conducir. El permiso de conducir dejará de ser vitalicio para ser crediticio. En general, todos los conductores recibirán 12 puntos, que mantendrán de por vida, siempre que no cometan infracciones. Los noveles (con menos de tres años de experiencia) recibirán ocho, que se convertirán en 12 si no son sancionados en dos años. Además, como bonificación, todos los no denunciados durante tres años recibirán dos puntos extra y otro más si son prudentes otros tres años. El máximo del que se podrá presumir es de un total de 15 puntos.

La nueva licencia "se ha construido con un amplio consenso político y social", según el ministro del Interior

"Lo único que va a cambiar es que sólo habrá sitio para los buenos conductores", según Tráfico

Pero si se cometen infracciones, comienza la merma de puntos. Si se circula bajo los efectos del alcohol (más de 0,50 miligramos por litro de aire espirado), en sentido contrario, de forma temeraria o se excede en un 50% el límite de velocidad permitido, se pierden seis puntos de una vez. Si se ha bebido entre 0,25 y 0,50 miligramos de alcohol por litro y se coge el volante se restarán cuatro puntos, los mismos que si no se respeta un stop o un semáforo en rojo o se da marcha atrás en autovías. Se perderán tres puntos por no mantener la distancia de seguridad, cambiar de sentido en lugares prohibidos, conducir produciendo deslumbramiento o usando el teléfono móvil. Por último, costará dos puntos parar en curvas o cambios de rasante, conducir sin utilizar cinturón de seguridad, casco o las luces cuando sea obligatorio.

No obstante, la tramitación parlamentaria redujo de 45 a 31 las conductas que supondrán merma de puntos. Por ejemplo, no se sancionará con pérdida de créditos cuestiones de papeleo. Además, se acordó que no se puedan perder todos los puntos en un solo día, salvo en casos extremadamente graves.

Para recuperar los créditos, hay que conducir durante dos o tres años sin cometer sanciones o realizar cursos de reeducación: de 15 horas, para quienes hayan perdido parte del crédito (costarán unos 187 euros) y de 30 horas (unos 375 euros) para quienes se hayan quedado sin ningún punto.

El ministro del Interior, José Antonio Alonso, subrayó en la presentación de la campaña divulgativa del nuevo sistema, que "se ha construido con un amplio consenso político y social". De hecho, el Congreso de los Diputados aprobó el 29 de junio el proyecto de ley por el que se crea el carné casi por unanimidad, sólo se opuso el PNV por cuestiones competenciales.

El Gobierno reitera que el objetivo de la nueva licencia es reducir la mortalidad en las carreteras, ya que supone la persecución del conductor que frecuentemente pone en peligro su vida y la de los demás. "Está dirigido contra el multirreincidente, con voluntad reeducadora que espero que se traduzca en buenos resultados", explicó el ministro en el Congreso.

España sigue estando a la cabeza de los países europeos con más víctimas mortales sobre el asfalto, con una media de 128 por cada millón de habitantes cuando el promedio de la UE en 2003 era de 103. El Real Automóvil Club de España (RACE) calcula que el nuevo permiso reducirá un 10% la mortalidad. La Dirección General de Tráfico (DGT) en la campaña de comunicación sobre el carné no precisa ninguna cifra, pero asegura que descenderán "muy significativamente" los accidentes. El compromiso es que, junto a otras medidas, como el plan de radares y las campañas de sensibilización, se reduzca en un 40% las víctimas mortales de 2004 a 2008. En otros países en los que se ha implantado el permiso por puntos los resultados han sido más que apreciables. En Italia, por ejemplo, en los primeros seis meses de su puesta en marcha (en julio de 2003) se redujo un 22% la mortalidad.

Este mes comenzará una campaña de comunicación que se desarrollará en tres fases, hasta julio. La primera consiste en generar interés sobre la nueva licencia; la segunda, pretende informar con profundidad del nuevo mecanismo; y la tercera, crear confianza en el público. La DGT quiere transmitir un mensaje tranquilizador: "Lo único que va a cambiar es que sólo habrá sitio para los buenos conductores". El 71% de los españoles está de acuerdo con el nuevo sistema y un 64% cree que reducirá la siniestralidad, según un sondeo del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) de enero de 2005.

Además, a lo largo de este mes se conocerán los 169 centros que impartirán los cursos, se realizarán las unidades didácticas, el manual para el alumno y un DVD interactivo. En febrero los formadores comenzarán a familiarizarse con los contenidos que después deberán enseñar; se activará una página web dedicada en exclusiva al carné (www.permisoporpuntos.es) y se iniciará una prueba piloto del sistema informático en Valladolid. En abril, se pondrá en marcha un teléfono para atender las dudas de los ciudadanos y el sistema para conocer por Internet el saldo de puntos. Para acceder al historial de sanciones será necesaria una firma electrónica. En mayo se enviará una carta a todos los conductores y se encartará un número especial de la revista de Tráfico en los dominicales de los principales periódicos. Y en junio, un mes antes de su implantación, se emitirán varios anuncios divulgativos. Entonces todo estará listo para que comience una nueva era en las carreteras.