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Zapatero considera que España cumple las condiciones para incorporarse al G-8

El presidente adelanta que el superávit de las administraciones públicas estará por encima del 1%

El Gobierno considera que España cumple las condiciones para incorporarse al G-8, el grupo que reúne a los siete países occidentales más industrializados del mundo, más Rusia, invitada al club por mor de su condición de potencia nuclear. La economía española se ha convertido en la octava del mundo, con lo que se ha situado por delante de Canadá, que ha pasado a ocupar la novena posición en la clasificación de países por volumen de su PIB. El Ejecutivo está en condiciones de reivindicar el lugar que le corresponde, como quedó de manifiesto en una reunión del presidente con empresarios ayer.

El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó ayer, durante la clausura de la reunión del Patronato de la Fundación de Estudios Financieros (FEF), que "es bueno que se reconsidere" el papel internacional de España, más que nunca al cumplirse 20 años de la adhesión a la Unión Europea. "España tiene que ser un miembro activo del nuevo mundo que se está creando", afirmó Rodríguez Zapatero, tras describir un contexto en el que China, Brasil e India están ya entre las 10 mayores economías del mundo y representan el 22% del PIB mundial.

El jefe del Ejecutivo respondió así al presidente de la FEF, Aldo Olcese, que ayer señaló que la entidad apoyará la presencia de España en el G-8. EE UU, el Reino Unido, Francia, Japón, Alemania, Italia y Canadá, junto con Rusia, integran el grupo. La incorporación al mencionado club de países más poderosos del mundo fue uno de los caballos de batalla de José María Aznar, predecesor de Rodríguez Zapatero. Aunque aún no figura en la agenda oficial de prioridades en materia internacional, fuentes de La Moncloa aseguraron que "se ha hablado de ello y no se descarta" llamar a las puertas del grupo.

La FEF presentó ayer un estudio titulado España y la nueva arquitectura económica y financiera internacional. El desafío del G-8, que concluye que España "cumple para entrar en el G-8" puesto que su peso económico y político es hoy superior al de Canadá. Según Luis Ravina, decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de Navarra, que dirigió el análisis, la economía española es, en función del PIB, la octava del mundo, "gracias al actual ciclo expansivo y la fortaleza del euro frente al dólar". Ello, añade Ravina, "legitima" a España a revisar su posición internacional.

El presidente del Gobierno español expresó su optimismo sobre la marcha de la economía y señaló que España crece a un ritmo del 3,5%, "el doble que la media de la Unión Europea", con una tasa de paro que ha descendido hasta el 8,4%, la más baja desde 1979. Además, confirmó que las administraciones públicas -Estado, Seguridad Social y comunidades autónomas- cerrarán este ejercicio con un superávit "por encima del 1%", como ya anunció la semana pasada el director de la Oficina Económica de Presidencia del Gobierno, Miguel Sebastián. Rodríguez Zapatero señaló que, de los 25 países de la UE, sólo Finlandia, Dinamarca y Suecia tienen una situación económica parecida. Además, añadió, el ratio de deuda pública en España se sitúa en el 43% del PIB, cifra que calificó de "magnífica".

El jefe del Ejecutivo aseguró que el Código Unificado de buen gobierno de la empresa, que refundirá y ampliará las recomendaciones elaboradas en su día por las comisiones Olivencia y Aldama, estará listo "poco después de Reyes".

El nuevo código, dijo Zapatero, abordará la definición de consejero independiente y fomentará la transparencia en materia retributiva. Además, se incentivará "la diversidad de género en los puestos directivos de las empresas", dijo el presidente del Gobierno, que denunció que, "en 2004, las consejeras sólo eran el 3% en el conjunto de las empresas cotizadas".

Rodríguez Zapatero recordó que el pasado febrero se aprobó un código de buen gobierno para los miembros del Ejecutivo y altos cargos de la Administración y anunció que, en unos meses, verá la luz "un código de buenas prácticas para las empresas públicas y un código de conducta para los empleados públicos en los procesos de contratación".

Igualmente, el presidente del Ejecutivo anticipó que el próximo marzo estará listo el Proyecto de Ley de Garantía de Igualdad, "que pretende garantizar la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres".

El presidente del Santander, Emilio Botín (a la derecha), varios altos cargos de la Administración y otros empresarios escuchan a Zapatero.
El presidente del Santander, Emilio Botín (a la derecha), varios altos cargos de la Administración y otros empresarios escuchan a Zapatero.EFE

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