Gallardón agradece la paciencia ciudadana con las obras

El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, agradeció "la paciencia y la comprensión" que los madrileños han tenido este "duro" año con las obras que el Ayuntamiento realiza en la ciudad, y que harán que ésta alcance la "realidad de liderazgo dentro de España y de la Unión Europea". El regidor difundió ayer su tradicional mensaje de Navidad para felicitar a los ciudadanos y referirse a algunos de los asuntos urbanos más candentes.

En el tradicional mensaje de Navidad para felicitar las fiestas a los madrileños a través de los medios de comunicación, Gallardón se refirió a 2005 como un año "intenso" en el que han sucedido una serie de acontecimientos y en el que Madrid "defendió con orgullo" sus aspiraciones para ser nominada candidata a organizar los Juegos Olímpicos de 2012.

Aunque no se consiguieron los Juegos de 2012, quedó acreditado que la ciudad "está en condiciones" de organizar ese gran acontecimiento deportivo, algo que hará, reiteró Gallardón, "cuando se tome la decisión de presentar una nueva candidatura". Será entonces cuando "el magnífico equipaje de experiencia y de apoyo popular se convertirá en un soporte muy importante", agregó.

Ayer, la cadena británica BBC reveló que Londres se adjudicó la organización de los Juegos Olímpicos de 2012 por un error en la votación de las ciudades candidatas, según aseguró el israelí Alex Gilady, miembro del Comité Olímpico Internacional (COI). Gilady dice que la equivocación se produjo el pasado julio en Singapur en la tercera ronda de votaciones, y que la gran perjudicada resultó Madrid, que, según sus hipótesis, hubiera sido la ciudad vencedora. Pero el alcalde no hizo ninguna referencia a este hecho en su mensaje navideño.

El error provino aparentemente del delegado griego del COI Lambis Nikolaou, quien presionó el botón equivocado y dio un voto a París en vez de a la capital española, lo que dejó a esta ciudad fuera de la ronda final, a la que accedieron Londres y París.

El alcalde se refirió a Madrid como "la capital de una gran nación" que ha emprendido un proceso de modernización. En este punto dijo ser "plenamente consciente" de que las obras municipales han causado molestias a los madrileños durante 2005, "el año más duro de todos".

Al explicar por qué decidió acometer las grandes obras, entre ellas la de la M-30, Gallardón dijo: "Porque estamos convencidos de que no nos podemos quedar anclados en el pasado, porque no queremos tener una pereza intelectual que nos deje quietos, porque queremos, de verdad, ser un espacio de oportunidad. Y eso solamente se consigue abordando los grandes proyectos que estamos haciendo en Madrid".

"Comprensión"

Gallardón agradeció a los ciudadanos su "paciencia, comprensión y apoyo a ese esfuerzo colectivo" a través del cual se va a "modificar" la ciudad, lo que será palpable el próximo año, cuando concluya "la inmensa mayoría de las obras" y se cumplan los compromisos adquiridos en el programa electoral del PP para el Ayuntamiento. "Los madrileños, muchos ya lo saben, apreciarán que, cuando las obras terminen, mejorará la calidad de vida de los ciudadanos, mejorará el medio ambiente y mejorará, en definitiva, esa ciudad amable y eficaz que todos queremos", afirmó.

El alcalde destacó además la importancia que para Madrid tiene la Ley Especial de Capitalidad, cuyo proyecto aprobó ayer el Consejo de Ministros, porque significa, entre otras cuestiones, la vinculación de Madrid con la idea de la vertebración de España.

"Madrid tiene que identificar el sentimiento de los españoles y abrir sus puertas", dijo Gallardón, para quien "ser capital es ser capaz de representar las aspiraciones e ilusiones de todos los españoles que tienen que considerar a Madrid como una ciudad suya". Abogó porque la ciudad sea "un elemento de unión de la España constitucional en la que creemos y a la que defenderemos siempre". El alcalde se mostró convencido de que sólo desde la "solidaridad, el diálogo y el encuentro permanente" los madrileños seguirán liderando la idea de una España "en la que creemos y a la que queremos profundamente".

Tuvo también un recuerdo para las víctimas de todo aquello que impide a una persona desarrollar sus condiciones y sus proyectos personales, e instó a alcanzar la igualdad de todos los madrileños desde la responsabilidad "pública y privada".

Gallardón concluyó su mensaje navideño deseando a todos los madrileños, en nombre de la Corporación municipal, "lo mejor" para 2006 que será, auguró, un gran año.