El tripartito celebra conjuntamente el segundo aniversario del Pacto del Tinell

Ya van dos años de gobierno de las izquierdas en la Generalitat, la mitad de la legislatura. El paso del ecuador será conmemorado conjuntamente hoy por los tres partidos que el 14 de diciembre de 2003 firmaron el pacto de gobierno, en un acto que se celebrará en el mismo escenario, el Saló del Tinell. La celebración conjunta es en sí misma un signo, con el que los tres partidos quieren mostrar la cohesión existente entre ellos. Hace un año prefirieron conmemorar el primer aniversario cada uno por su cuenta, obsesionados como estaban entonces por marcar sus respectivos perfiles.

Algo ha cambiado entre el primer y el segundo aniversario del Pacto del Tinell y ese algo es la confianza en sí mismos y en la capacidad del propio Gobierno catalán adquirida por cada uno de los tres partidos. "Este aniversario nos llega en un buen momento, con el todavía reciente acuerdo sobre el Estatuto y con un presupuesto expansivo para 2006 que permitirá hacer muchas cosas", explicó uno de los dirigentes de ICV que ha organizado el acto, Jordi Guillot.

Los protagonistas en el acto de hoy, al que han sido invitados los cuadros dirigentes de las tres formaciones políticas, serán los mismos que firmaron el pacto en 2003: Pasqual Maragall, en su condición de presidente del PSC; Josep Lluís Carod, presidente de Esquerra Republicana (ERC), y Joan Saura, presidente de la coalición Iniciativa Verds-Esquerra Unida i Alternativa (ICV-EUiA).

Si el año pasado ERC fue el partido más interesado en una conmemoración por separado, este año ha sido el que ha tomado la iniciativa para que fuera conjunta. Carod afirmó ayer, tras la reunión de la dirección de ERC, que el acto de hoy "sirve para certificar el acierto de la apuesta de gobierno realizada por Esquerra" tras las elecciones autonómicas que daban por vez primera una mayoría parlamentaria de izquierdas, pero también permitían una mayoría de signo nacionalista con CiU y ERC.

Los republicanos creen que haber alcanzado el acuerdo en Cataluña sobre la reforma del Estatuto y de la financiación justificaría por sí sólo la opción tomada por su partido en 2003. Pero agregó que tan importante como esto es conseguir que Cataluña sea "un país más inclusivo".

Más seguros que en 2003

Para explicar este último objetivo, Carod recurrió a una expresión puesta en boga por los recientes estallidos de malestar social registrados en Francia. Se trata, dijo, de que Cataluña sea un país en el que "funcione el ascensor social", de manera que todos los ciudadanos puedan tener una percepción positiva de la sociedad de la que forman parte. Y no se produzcan explosiones como las que se han vivido en los suburbios de numerosas ciudades francesas y algunas de Holanda.

Los socialistas también están convencidos de que el paso del tiempo ha consolidado al tripartito. Y de que esta celebración conjunta es una prueba de ello. El portavoz del PSC, Miquel Iceta, señaló la diferencia entre la conmemoración de este año y la del anterior. En 2003, dijo, "quizá había todavía interés en explicarse cada uno a su manera". En cambio, ahora los tres partidos "estamos más seguros" y esta conmemoración es una prueba de ello.

El presidente de ICV, Joan Saura, lamentó que las crisis que han salpicado estos dos años del Ejecutivo de coalición presidido por Maragall, a las que aludió como "ruidos", hayan "tapado" la obra de gobierno llevada a cabo.

Saura reconoció también que el tripartito "no ha satisfecho todavía las expectativas sociales" creadas por el acceso de la izquierda catalana al Gobierno de la Generalitat tras 23 años de mandatos de los nacionalistas de Convergència i Unió (CiU). Sin embargo, se mostró convencido de que será posible aplicar "la mayor parte" del programa del Tinell.

El principal grupo de la oposición, el de CiU, consideró "muy negativamente" los dos años de gobierno de la coalición de izquierdas. Su portavoz adjunto en el Parlament, Josep Maria Pelegrí, sostuvo que la firma del Pacto del Tinell "fue una aventura que generó ilusión, que ahora se ha convertido en nerviosismo".