AvantPress consolida su línea de libros de música con 'Discos ocultos'

Raül Serrador lo tiene claro: la música se disfruta mejor si se conoce la trayectoria de su autor e intérprete, las características de su género o las peculiaridades de la industria discográfica cuando el elepé de un artista fue escrito, grabado y publicado. Fruto de su pasión es la editorial AvantPress, que se consolida con un nuevo título, Discos ocultos. Su autor, Juan Vitoria, reúne casi 400 obras maestras de la música popular contemporánea que no han trascendido.

Su libro más conocido es 'Historia del rock en la Comunidad Valenciana'

Desde bien joven, Serrador se dio cuenta de que esa música de pop y rock que tanto le gustaba era algo más que un mero divertimento, a finales de los 80 comenzó a escribir sobre sus grupos favoritos; primero en fanzines, después al frente de la publicación universitaria The Elm Magazine y, desde 1989, como editor y coordinador del suplemento de la Comunidad Valenciana de la revista especializada MondoSonoro. Con la inestimable ayuda de su compañera Susana Monteagudo y el convencimiento pleno de que aún quedaba mucho por hacer en el terreno del periodismo y la literatura musical, no tardó demasiado en dar el siguiente paso: en enero de 2000 publicó el libro Metal XXI, de Luis A. Abad y Carlos Álvarez, y, de este modo, quedó inaugurado el catálogo de su editorial AvantPress.

"Llevaba algún tiempo dándole vueltas a la posibilidad de crear una marca para desarrollar diversos proyectos editoriales, tanto revistas como libros dedicados a analizar y difundir la cultura contemporánea o, si quieres, la cultura rock en el sentido más amplio posible del término", explica Serrador.

En una época en la que las cifras de ventas de libros no son precisamente halagüeñas, una iniciativa como la de AvantPress podría parecer más una heroicidad adolescente que una empresa con vocación de futuro. Para el editor valenciano, sin embargo, la realidad es bien distinta.

Asegura que, al margen de la tan cacareada crisis discográfica, cada día se consume más música y que, además, siempre habrá un público, más o menos minoritario, interesado en el rock como fenómeno cultural, más allá del aspecto meramente sonoro. "Creo que hay un hueco en el mercado. Un hueco que tal vez no se traduzca en grandes ventas, pero que, al menos, sí nos permita cubrir los gastos de cada nuevo título y, a la vez, ir creciendo poco a poco. Por otro lado, la irrupción de las nuevas tecnologías ha incrementado espectacularmente la oferta de información, pero el libro es un formato que, en mi opinión, puede convivir con el resto de soportes y, de hecho, en ciertos aspectos, me parece absolutamente insustituible", dice un optimista Serrador.

Tras Metal XXI, la editorial valenciana publicó sendos trabajos biográficos: Slipknot, de Carlos Álvarez, y Surfin' Bichos, Chucho y Mercromina. Sermones en el desierto, de Jota Martínez Galiana. "El criterio último que nos lleva a publicar o no un libro es totalmente subjetivo y personal; es decir, sacamos sólo títulos que a nosotros nos gustaría leer y relacionados con temas sobre los que nos apetece aprender y descubrir cosas nuevas", señala.

Es el caso, también, de Historia del rock en la Comunidad Valenciana. 50 años en la colonia mediterránea, un abultado volumen con pretensiones académicas, coordinado por el propio Serrador y en el que participaron casi una treintena de autores. "Es nuestro libro más importante. Contamos con el apoyo del Instituto Valenciano de la Música y la colaboración de la Sociedad General de Autores y Editores, y eso nos dio cierto aval. Así, mucha gente descubrió nuestro trabajo gracias a este título", comenta.

Discos ocultos es el libro más reciente de AvantPress. Lo firma el popular crítico musical Juan Vitoria y, como su título sugiere, propone casi 400 "obras maestras de la música popular contemporánea que, por unos motivos u otros, no lograron trascender y convertirse en clásicos. No es un libro de rarezas, sino una selección de discos que están a la altura de los más grandes y que no deberían faltar en la colección de ningún aficionado a la buena música", apunta el propio Vitoria. En su origen, el autor concibió Discos ocultos como una especie de apéndice de Los 100 mejores discos del rock que publicó en La Máscara hace ya doce años.