El PSOE señala que si la sala funcionó durante unas horas fue por culpa del alcalde

Los grupos de oposición (PSOE e IU) mostraron ayer su satisfacción por el hecho de que finalmente la discoteca Adraba no vaya a abrir sus puertas, pero arremetieron contra el gobierno municipal por dar lugar a una situación que ha acabado en los tribunales.

El concejal socialista Óscar Iglesias aplaudió el auto del juez que avala el cierre de la sala, y aseguró que si ésta pudo abrir durante unas horas el miércoles fue porque el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, "no hace bien su trabajo". Se refería a que fue el Gobierno municipal el que redactó la nueva ordenanza que permite que un local pueda ejercer su actividad si solicita licencia y no obtiene respuesta del Ayuntamiento en el plazo de dos meses. Este procedimiento, afirmó Iglesias, fue criticado en su día por el grupo socialista, que manifestó su desacuerdo en que se pudiera aplicar a casos que afectaran "al interés general".

El concejal de IU Julio Misiego anunció que va a pedir explicaciones al edil de Seguridad, Pedro Calvo, para "conocer con detalle" por qué Protección Civil emitió un informe favorable sobre la seguridad de Adraba mientras que la Junta de Centro opinaba lo contrario. Misiego reclamó "una postura conjunta" de ambos departamentos "para que se apliquen con el máximo rigor todos los requisitos de seguridad". "De no ser así, se cometerá una gravísima irresponsabilidad por parte de quien tome la decisión de autorizar la actividad sin haber exigido todas las cautelas", advirtió.