El voto en contra de los concejales zaplanistas impide al alcalde popular de Orihuela remodelar su equipo

El enfrentamiento entre los dos sectores del PP, los partidarios del presidente del Consell, Francisco Camps, y los seguidores de su antecesor en el cargo, Eduardo Zaplana, alcanzó ayer en Orihuela su máxima expresión: el alcalde, José Manuel Medina, no pudo hacer valer la mayoría absoluta de su grupo, y perdió la votación de su propuesta para remodelar el equipo de gobierno local. La moción de Medina fue rechazada por los ocho ediles zaplanistas, liderados por la ex primer teniente de alcalde, Mónica Lorente, los tres ediles del PSPV, y el concejal de Esquerra Verde. Un cuarto edil socialista, Isidro Hernández, y los seis del Centro Liberal se abstuvieron. La iniciativa de Medina sólo contó con el respaldo de sus cinco concejales afines.

Medina llevó al pleno de ayer la moción de la remodelación de su equipo de gobierno aprobada a finales de la pasada semana. El alcalde acordó un nuevo reparto de delegaciones entre los 14 ediles del grupo popular que, en la práctica, supuso apartar de las áreas clave de la gestión municipal a los ediles zaplanistas, entre ellos, Mónica Lorente, a la que retiró la delegación turismo.

El nuevo reparto de competencias y delegaciones también llevaba aparejado la pérdida de la asignación económica. Pese a ello, el grupo de concejales zaplanistas optó por propiciar la derrota en el pleno de José Manuel Medina y declinó respaldar la iniciativa del concejal de Esquerra Verde que solicitaba la retirada de ese punto del orden del día del pleno.

"Hemos votado en contra del nuevo reparto de competencias que propone el alcalde porque es desequilibrado y desproporcionado y no responde a criterios objetivos", dijo Lorente al término del pleno. "Ahora, la pelota está en el tejado de Medina. Deberá reflexionar si sigue adelante con su medida mediante decreto o, por el contrario, se para a analizar cómo el PP, con mayoría absoluta, puede resultar derrotado en el pleno", añadió.Este periódico intentó sin éxito conocer la opinión del alcalde sobre el segundo episodio de indisciplina de los ediles zaplanistas. El primero fue en el pleno de septiembre cuando el grupo de Lorente rechazó de planes urbanísticos impulsado por el alcalde. Entonces, Medina eludió la derrota merced al apoyo de los concejales del Centro Liberal y del edil socialista Isidro Hernández.

Para el secretario de Organización del PSPV, Vicent Sarrià, el nuevo cisma del PP oriolano deja en entredicho la gobernabilidad del Ayuntamiento e instó a Camps "a que tome medidas". "Estamos en ante un caso en el que la corrupción y la división del PP van de la mano", añadió.