La Comunidad suspende el desdoblamiento de la M-513

La Consejería de Infraestructuras y Transportes ha suspendido la adjudicación de las obras de duplicación de la carretera M-513, que une Pozuelo con Boadilla del Monte atravesando el bosque del municipio. Fuentes del Gobierno regional explicaron que han vuelto a estudiar el proyecto, porque no estaban convencidos. El PSOE denunció que en la carretera se iban a talar 676 árboles.

El pasado 31 de agosto, la consejería anunció que el proyecto, desarrollado por sus técnicos, estaba listo y que las obras se encontraban en fase de contratación. La inversión era de 13,4 millones y el plazo de ejecución de 20 meses.

La consejería, que dirige María Dolores de Cospedal, mantenía en agosto que el desdoblamiento de la M-513 era imprescindible para mejorar el tráfico entre esa localidad y la capital, y aumentar la seguridad vial en la zona. Sin embargo, la ampliación suscitó las críticas de los grupos de la oposición de Boadilla y de los ecologistas. El PSOE denunció que el proyecto era una "aberración medioambiental" y suponía la desaparición de 676 árboles del bosque mediterráneo que sobrevive en el municipio, muchos de ellos centenarios.

Ahora Transportes ha dado marcha atrás. Fuentes de la consejería explicaron: "Las obras no se van a adjudicar porque vamos a estudiar otras posibilidades. Es una zona muy sensible ambientalmente y quizá se puedan encontrar soluciones alternativas". Entre ellas, el Gobierno regional baraja efectuar mejoras en carreteras de los alrededores que descongestionen esta vía y acondicionar la glorieta de acceso a la M-40. "También hay que tener en cuenta que el tren ligero va a llegar a Boadilla en breve", añadieron en la consejería.

Fomento

El alcalde de Boadilla, Arturo González Panero (PP), explica que la situación ha cambiado debido a que el Ministerio de Fomento ha presentado un proyecto para conectar la M-40 con la M-501 (carretera de los pantanos). Los coches utilizarían esta vía para acceder a la M-40 y eso descongestionaría la M-513, lo que podría evitar su duplicación, al menos de momento.

Las protestas de los concejales socialistas contra los planes del Gobierno regional arreciaron el 26 de julio pasado, cuando se encadenaron junto a vecinos a las encinas centenarias que iban a desaparecer. Además, interpusieron un recurso contencioso administrativo en el que exponían que en la tramitación del proyecto se había omitido el trámite de información pública, impidiendo la interposición de alegaciones.

El portavoz del grupo municipal socialista, Enrique Hernández, mantiene que sus protestas han jugado un papel fundamental en la decisión adoptada por la consejería. "Estamos encantados con la noticia, aunque seguiremos presionando para que se modifique el proyecto definitivamente y para que el equipo de gobierno deje de propinar hachazos a nuestro monte sin el menor escrúpulo", afirma.

Los socialistas proponían como alternativa construir un carril reversible que diera servicio al sentido que más circulación soporta en hora punta.