Los coches mandan en Gines

El alcalde de la localidad sevillana de Gines, Francisco González, del PP, recuerda que en los años sesenta él y los demás niños del pueblo jugaban a la pelota en la carretera Sevilla-Huelva. "No pasaba ni un coche", cuenta. Hoy esa estampa sería impensable ni siquiera en la plaza del Ayuntamiento, atestada de coches y vehículos de carga y descarga estacionados hasta en tercera fila. La construcción de aparcamientos es uno de los proyectos considerados como urgentes para el gobierno municipal, que contempla construir 700 plazas subterráneas.

Según el alcalde, lo peor del desarrollo urbanístico que ha vivido Gines en las dos últimas décadas es que los que lo idearon "se quedaron muy cortitos" al pensar las infraestructuras. Este municipio, a ocho kilómetros de la capital, fue de los pioneros en la construcción de urbanizaciones de viviendas unifamiliares. Empezaron a proliferar en los años sesenta, con grandes casas que en su mayoría funcionaban como segunda residencia de vecinos de la capital, que buscaban en verano esos tres o cuatro grados menos de temperatura que garantiza la cornisa del Aljarafe. Con el tiempo, Gines se convirtió en uno de los primeros pueblos dormitorio de Sevilla, lo que ha supuesto un lento pero ininterrumpido aumento de la población, que se ha multiplicado por cuatro en tres décadas: de los 2.800 habitantes con los que contaba en 1970 a los 12.500 censados hoy.

Con todo, el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que ya cuenta con la aprobación inicial del pleno municipal, prevé seguir creciendo. "El techo está en 19.500 habitantes", asegura Francisco González, quien cree que esa población resulta "asumible" porque supone una densidad de población de 22 viviendas por hectárea, por debajo de muchos municipios de la zona. El futuro PGOU agotará los tres kilómetros cuadrados que ocupa el término municipal de Gines. El plan contempla espacios para comercios, equipamientos deportivos, un parque de 35.000 metros cuadrados y 960 viviendas (actualmente hay alrededor de 4.500).

El alcalde, no obstante, advierte de que para que su proyecto de crecimiento funcione hace falta mejorar las infraestructuras viarias y, sobre todo, el transporte público. "En las grandes ciudades españolas se acortan las distancias con el tren de cercanías, y aquí no acaba de funcionar", afirma el regidor, quien apuesta por un anillo ferroviario que rodee el Aljarafe y se complete con autobuses lanzadera y la línea 1 del metro de Sevilla. Para el resto de los servicios, González aboga por la coordinación de los municipios del área metropolitana. "Para qué quiero hacer en mi pueblo un multicine si hay otro cruzando la calle. La oferta no puede ser repetitiva, sino complementaria", afirma.