La UE contribuirá a la formación de las fuerzas de seguridad palestinas y gestionará la frontera con Egipto

La Unión Europea tendrá por primera vez en su historia protagonismo en la vertiente de seguridad del conflicto israelo-palestino después de que las partes enfrentadas hayan aceptado que agentes europeos participen en la gestión del puesto fronterizo de Rafah, entre la franja de Gaza y Egipto, y que policías de la UE contribuyan de manera sustancial a la formación y capacitación de las fuerzas de seguridad palestinas en su propio territorio. España intervendrá en ambas operaciones con policías y guardias civiles.

Los Veinticinco dan un paso cualitativo en su relación con el secular conflicto después de que Israel dejara de lado sus reticencias ante la presencia europea sobre el terreno. La UE había hecho en el pasado ingentes esfuerzos diplomáticos y financieros para pacificar la región, pero hasta ahora no había conseguido una implicación en la vertiente de seguridad. "A finales de año, la UE tendrá la mayor presencia de su historia en Oriente Próximo", dice Javier Solana, coordinador de la política exterior comunitaria. Solana llegó ayer a Israel, donde hoy y mañana se entrevistará con los más altos responsables del Gobierno. También lo hará con las autoridades palestinas. Entre otros objetivos, la visita se propone consolidar el impulso político a esta operación de seguridad.

El cruce de Rafah está cerrado desde que Israel evacuó Gaza en septiembre. La Autoridad Palestina quería tenerlo abierto a partir de mañana. No ha sido posible, pero Bruselas da por hecho que lo será en cualquier momento a partir del próximo lunes y que tendrá desplegado a todo el personal de seguridad necesario antes de fin de mes. Se desea que el paso permanezca abierto las 24 horas del día, algo nunca hecho, para contribuir a la máxima fluidez en el tránsito de personas y bienes. "Será el único punto por el que los palestinos podrán salir de Gaza sin ver a un israelí. Verán a europeos", señala una fuente de Bruselas. En el lado exterior de Rafah la seguridad será responsabilidad egipcia.

Esta operación se verá complementada con el envío de agentes de policía europeos a los territorios palestinos para asesorar y formar a la Policía Civil Palestina, un cuerpo incipiente necesitado de todo tipo de asistencia. Desde primeros de año ya hay un puñado de agentes en la zona, que a partir del 1 de enero de 2006 se verá reforzado hasta superar la treintena. Con presencia de otros países, como Noruega, a los que también se ha pedido colaboración, el conjunto europeo podría llegar hasta el medio centenar. Es una operación de gran calado y notable duración, con un despliegue inicial de tres años, susceptible de ampliación.

Miguel Ángel Moratinos, ministro de Asuntos Exteriores, indicó la semana pasada en Bruselas que España enviará un máximo de 10 policías y guardias civiles.