La grandeza de Schubert
Reciente todavía la impresión schubertiana de La bella molinera, en la voz del conmovedor Thomas Quasthoff y el piano de Charles Spencer, nos llega otra lección magistral sobre el mismo compositor, alma y razón pura del romanticismo germano. La han dictado tres grandes de nuestro tiempo y se trata de los dos siempre sorprendentes tríos de 1827, catalogados por Otto Rich Deutsch con los números 898 y 929. Culminaba la existencia, breve en años y larga en consistencia y creación de bellezas, del grandísimo Schubert (Lichtental, 31 de enero de 1797-Viena, 19 de noviembre de 1828). La versión de ahora enaltece y valora al máximo la herencia pues el pianista Christian Zacharias (alemán nacido en Jamshedpur, India, 1950), el violinista Frank Peter Zimmermann (Duisburg, 1965) y el violonchelista Heinrich Schiff (Gmunden, 1952) tienen facultades y saberes, sensibilidad y alto estilo.
Ciclo de Grandes Intérpretes
F. P. Zimmermann, violinista; Heinrich Schiff, violonchelista, y Ch. Zacharías, pianista. Obras de Schubert. Auditorio Nacional. Madrid, 8 de noviembre.
Los tres intérpretes germanos hicieron maravillas y conmovieron al auditorio. No cabe mejor ni más valiosa lección magistral, tan merecedora del aplauso como de la gratitud, después de una tarde musical inolvidable.