Construir "con sentido común"
El Colegio de Arquitectos de Valencia presenta un manual y una exposición sobre la edificación sostenible
El sector de la construcción consume el 40% de la energía que se gasta en el mundo y una cuarta parte del agua y la madera. Con esta reflexión de punto de partida, las asociaciones de arquitectos firmaron hace dos años una declaración en la que se comprometieron a promocionar la edificación sostenible.
El Colegio Territorial de Arquitectos de Valencia (CTAV) recogió esa inquietud y en 2004 se embarcó, con la colaboración de la Consejería de Infraestructuras, en un proyecto de formación que busca concienciar a este colectivo profesional de la necesidad de reorientar las técnicas y los materiales hacia prácticas más respetuosas con el entorno.
El área de Medio Ambiente del CTAV organizó el año pasado un primer ciclo de conferencias dedicado a la construcción sostenible con la participación de especialistas en arquitectura y también en ecología y el resultado ha sido el libro Hacia una arquitectura sostenible. En busca del sentido común, presentado el pasado jueves por el decano Francisco Taberner y por el coordinador del proyecto, Bruno Sauer.
"Los arquitectos tenemos algo que decir (...). No somos responsables de lo que nos encargan, pero sí somos responsables de lo que hacemos". Con esta cita del arquitecto Emilio Miguel Mitre arranca la primera de las 15 conferencias compiladas en este volumen.
¿Cómo ser más sostenibles, por ejemplo, con los materiales? Ignasi Pérez Arnal,
director del Área de Ecología de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Barcelona ESARQ-UIC, ofrece en el libro algunas pistas: "Mejor el material integral que los que han pasado por tamices o pulidos. Más vale ligero que pesado. Mejor hecho a mano por un artesano o industrializado; el intermedio no sirve. Mejor rosca que encolado, mejor el clic que la rosca. Mejor seco que mojado. Mejor el depósito que el enchufe, mejor enterrado que elevado, mejor para toda la vida o biodegradable...".
En una mesa redonda celebrada hace unos días en la sede del CTAV, Pérez Arnal demandó a la Administración Pública que esté a la vanguardia en lo que es la promoción de la sostenibilidad. "Hace falta formación, formación y más formación para provocar un cambio de actitud en los alumnos [de arquitectura] y en todos los agentes que intervienen en el proceso [de la edificación]", reiteró el experto.
Fernando Mut, director de Arquitectura de la Consejería de Infraestructuras y Transporte, apuntó que la oferta en estos momentos de edificaciones sostenibles es todavía escasa, pero insistió en que las normas y perfiles de calidad son un método de acercamiento a la sostenibilidad eficaz.
José Botía, director de marketing de la cementera Holcim España, aseguró que se está observando una mayor sensibilidad hacia la construcción sostenible y reconoció que existe una carrera de las compañías cementeras, siderúrgicas y cerámicas para reducir los niveles de CO2 y cumplir con el Protocolo de Kioto. "Desde el mundo empresarial podemos trabajar por la sostenibilidad, pero no alcanzaremos la meta de la sostenibilidad por sí misma sin la colaboración de las administraciones públicas, los proyectistas o los promotores", dijo Botía.
Este año el CTAV vuelve a la carga con un segundo ciclo dedicado al mismo tema. En esta edición se abordará específicamente la gestión del agua y también el planeamiento urbanístico y el valor empresarial de la sostenibilidad. Pero, mientras, para abrir boca, además de la presentación del libro, el colegio ha instalado en su sede de Hernán Cortés la exposición "100 materiales sostenibles", donde se ofrece más de una idea.
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