Los imanes llaman a la calma
La violencia que golpea a numerosas ciudades de Francia desde hace 10 días fue condenada por los imanes, que celebran el final del Ramadán, el mes sagrado musulmán. Todos han llamado a la calma. "Las consignas han sido comunicadas a los imanes para llamar a la calma", explica Azzedine Gaci, presidente del Consejo del Culto Musulmán de la región de Lyón. En París, el imán Larbi Kechat condenó las tentaciones a la violencia y subrayó que las "causas reales" de los disturbios son la "marginación, la exclusión y el paro". Otro imán,Zuhair Brek, recordó que un musulmán no puede "cometer actos de degradación".
Los obispos católicos se unieron a los deseos de los imanes al expresar su "viva preocupación". "Pensamos que la represión y la incitación del miedo colectivo no son una respuesta adecuada a estas tensiones", declaró Jean-Pierre Ricard, presidente de la Conferencia Episcopal de Francia. Ricard considera "vital" dar a los jóvenes "un futuro de libertad, dignidad y respeto del otro".
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