"Los alumnos odian cordialmente lo que leen por obligación"

Silvestre Vilaplana (Alcoi, 1969), licenciado en Filología y profesor de bachillerato, acaba de publicar en castellano El último caballero (Maeva), un libro que recoge la vida de Joanot Martorell, autor de Tirant lo Blanc, un libro de lectura tradicionalmente recomendado en los institutos de las comunidades de habla catalana. Cervantes dijo de él que era el mejor libro del mundo.

Pregunta. ¿Por qué ha optado por escribir la vida del autor de Tirant lo Blanc?

Respuesta. Era un personaje que reivindicar. Martorell es el autor de una de las novelas más importantes de la literatura universal y el gran público apenas conocía nada de él. Yo, como profesor, siempre explicaba el Tirant y siempre contaba las dos o tres anécdotas más conocidas de Martorell. Sólo con esas anécdotas se notaba que había un personaje muy intenso, pero hay mucho más en su vida de lo que había imaginado.

"Si lees mucho, la imaginación está más despierta y accedes a otros conocimientos"

P. ¿Por qué Tirant lo Blanc es una de las obras más importantes de la literatura universal?

R. Mario Vargas Llosa dice que es la novela total porque tiene todos los elementos para hacerla atractiva. Es realista, amorosa, erótica... capaz de traspasar épocas y culturas. En su momento de aparición, en 1490, rápidamente salió una versión en italiano, en castellano, en francés... Es una obra mágica.

P. ¿Qué opina de los libros de lectura obligatoria en los colegios?

R. Hay un problema. Por una parte, el temario obliga a que el alumnado lea una serie de obras que, de lo contrario, no leerá nunca. Por otra parte, la mayoría de las ocasiones es contraproducente. Lo que hacemos es que nuestros alumnos odien cordialmente todo aquello que les hacemos leer por obligación, especialmente las obras que son un poco más difíciles. Es complicado encontrar el equilibrio. En la mayoría de los planes de los institutos están los clásicos como lectura obligatoria, pero no sé hasta qué punto es bueno que los lean sin entender nada y sin ganas. Quizás hace 10 años un chaval de 15 estaba preparado porque tenía un bagaje literario anterior. Ahora nos encontramos con alumnos que con 15 años sólo han leído los libros que cada año ordena su profesor.

P. ¿Vamos hacia atrás?

R. La lectura en nuestra sociedad está claramente olvidada. No hay una voluntad seria de promocionarla. Somos uno de los países que menos lee del mundo. No puede ser. ¿Qué tenemos que hacer? Crear nuevos lectores o dar a leer los libros clásicos.

P. ¿Cómo se crea un lector?

R. El lector tiene que divertirse leyendo. Nadie lee por obligación. La lectura se fomenta. Y ése es el elemento que más falla. No se fomenta la lectura, pero no sólo en los institutos o los colegios sino en la sociedad.

P. ¿Es recomendable que los alumnos elijan sus libros?

R. Yo dejo a los chicos de secundaria que vayan a la biblioteca o librerías y elijan según sus gustos, les pido que me traigan una ficha y empiecen el libro. Si lo mando yo es una imposición, si lo hacen ellos, les gusta. Además, la evaluación consiste en contar el libro en clase como actividad oral.

P. ¿Por qué se relaciona tanto el libro con la clase de literatura?

R. Es cierto. Se dice que todo profesor lo es de Lengua, pero todavía no es así. La lectura es la base del pensamiento. Si lees mucho, la imaginación está más despierta.

P. ¿Qué opina de la reforma educativa?

R. No puede haber una reforma por año. No puede ser que dependa de cada Gobierno. Es lógico llegar a un pacto por la educación, un compromiso por mantenerlo y, sobre todo, aportar dinero.