La Schaubühne de Berlín reúne sus dos recreaciones de la 'Nora' de Ibsen
Anne Tismer protagoniza ambos montajes en el Festival de Otoño
Es uno de los proyectos más curiosos y atractivos que ha abordado en años la Schaubühne Am Lehniner Platz de Berlín, el gran teatro privado alemán, que ahora llega al Festival de Otoño de Madrid. Se trata de la presentación en la misma ciudad, los mismos días y con la misma actriz protagonista, de dos montajes dirigidos por Thomas Ostermeier e íntimamente relacionados entre sí. Por un lado, Nora, una adaptación de Ostermeier de Casa de muñecas, de Henrik Ibsen, que se representa en la Real Escuela Superior de Arte Dramático de Madrid (hoy, mañana y el sábado). Por otro, Wunschkonzert (Concierto a la carta), de Franz Xaver Kroetz, que estará en el Teatro de la Abadía mañana, el sábado y el domingo. Así el viernes 4 y el sábado 5 permiten ver, primero, Nora y, luego, trasladarse al otro teatro para ver Concierto a la carta, trayecto que también tendrá que hacer la actriz protagonista. Ambos montajes se han visto en Cataluña, pero no juntos.
La relación entre ellos viene dada por el hecho de que Concierto a la carta es la continuación de la historia de Nora 20 años después. En ambos espectáculos el papel femenino está interpretado por la actriz alemana Anne Tismer.
Ostermeier ofrece un final ligeramente distinto al que dio Ibsen a su heroína, ya que ésta no se limita solamente a dar el famoso portazo al abandonar a su marido y a sus hijos. Kroetz, actor, guionista de cine y autor teatral nacido en Múnich hace 59 años, deja a su Nora solitaria, silenciosa, envuelta por la banalidad de la acción cotidiana y sumergida en una existencialista y curiosa autodestrucción.
Como le ocurrió a Ibsen cuando estrenó Casa de muñecas, que escandalizó a la sociedad biempensante de la Noruega del siglo XIX, Kroetz, que en los años setenta fue muy polémico, también ha levantado ampollas entre ciertos sectores, aunque por motivos bien distintos ya que Nora ha sido una bandera del feminismo europeo del siglo XX y Kroetz la convierte aquí en una perdedora a la que no ofrece salida alguna.
Ostermeier, nacido en 1968, fue nombrado en 1999 director de la Schaubühne, un teatro privado berlinés fundado en 1962 que se caracteriza por tener una programación comprometida política y socialmente. Al frente de él han estado grandes de la escena mundial como Peter Stein que entre 1970 y 1985 convirtió este teatro en la gran alternativa al teatro público alemán con una nueva forma de cooperativa, dando voz a todos los artistas a la hora de seleccionar las obras. Fue un periodo en el que una detallada interpretación psicológica y la forma de manejar las épocas y los textos de la literatura mundial acuñaron el famoso estilo Schaubühne, que aún hoy cuenta con muchos seguidores.
El Festival de Otoño intentó sin lograrlo que en esta 22ª edición coincidieran la Nora de Ostermeier con una Casa de muñecas montada por el estadounidense Lee Brewer con su compañía Mabou Mines, en la que todos los personajes masculinos son actores enanos. La dirección de la muestra va a intentar que vengan el año que viene.
Babelia
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