La "tolerancia cero" de Sarkozy

Según la policía, el joven de origen turco de 21 años que sobrevivió a la descarga eléctrica aseguró en el hospital donde se repone de las quemaduras que "corría y corría sin saber por qué". Ayer, un joven amigo de las víctimas explicaba que sus compañeros escaparon para evitar un control de identidad por parte de la policía. El Ministerio del Interior lo niega y asegura que ningún agente persiguió a los jóvenes, que probablemente huyeron sin más cuando vieron un control policial de identidad, una tesis que comparte el fiscal encargado del caso, François Molins.

Y éste parece ser el problema. La guerra de Sarkozy contra la delincuencia, uno de los principales ejes sobre los que sustenta su imagen de candidato a la presidencia francesa, parece estar en el origen de situaciones como las de Clichy-sous-Bois. Los jóvenes del barrio se sienten acosados por las fuerzas del orden, temen a un simple control de identidad, y aseguran que los policías actúan con prepotencia y sin muchos miramientos. Ayer mismo, Sarkozy anunciaba que se enfrentará "con tolerancia cero" al problema de la violencia urbana, y prometía que cada semana visitará "uno de estos barrios".

Thierry Mignard, el abogado de las familias de las víctimas, dijo ayer que "no es posible estar satisfecho" de la actuación de Interior y pidió que sea designado un juez de instrucción que investigue la actuación policial para que "se diga la verdad", dado que la versión de las autoridades no ha hecho más que variar.