Una juez dispone protección policial para el derribo de una obra ilegal

Los vecinos de la urbanización Pinares de San Antón de Málaga está cerca de conseguir su empeño de derribar un muro de 92 metros de largo y seis de ancho que alzó una promotora contra las normas de dicha comunidad de propietarios y que el Tribunal Supremo (TS) ordenó demoler en una sentencia dictada en 1999.

Una providencia de la juez de Primera Instancia número 10 de Málaga, Nuria Martínez Rodríguez, ha fijado la demolición para el próximo día 3 a las 9.30 horas, y ha dispuesto que los vecinos cuenten con protección policial para ejecutar las obras.

Cinco años después de que el TS declarara la ilegalidad del muro y autorizara su derribo, el Ayuntamiento de Málaga concedió una licencia de obras a una promotora para construir cinco viviendas unifamiliares, proyecto que contemplaba el mantenimiento del muro. En esa promotora trabaja ahora el que entonces era gerente de Urbanismo del Ayuntamiento de Málaga, Andrés Gutiérrez Istria. El consistorio alegó entonces que no se le había notificado la sentencia del Supremo.

En mayo de 2005, un juzgado de Málaga dictó ya una providencia en la que autorizaba a los vecinos al derribo del muro, que hasta ahora no ha sido posible.