La casa de Piera se derrumbó por obras ilegales, según los técnicos

Las obras de rehabilitación que se estaban ejecutando en la planta baja del edificio donde murieron cinco ciudadanos marroquíes en Piera (Anoia) podría ser la causa del hundimiento que sepultó a los inmigrantes. Los técnicos municipales completaron ayer las tareas de inspección de los edificios afectados y apuntaron como posible causa del accidente a que las obras afectaran a una pared maestra de la casa.

El alcalde de Piera, Jaume Guixà, explicó ayer que el informe preliminar de los técnicos municipales pone de manifiesto que se había estado rebajando una parte inferior del inmueble, unas obras que habían afectado a la pared maestra. También se había cortado alguna de las vigas de esta misma planta "y esto cabe suponer que es la causa del derrumbe".

Guixà insistió en que la petición de obras que constaba en el Ayuntamiento era para realizar una intervención menor y reiteró que no se había concedido aún el correspondiente permiso, con lo que las obras que se llevaran a cabo serían consideradas ilegales.

Uno de los propietarios del edificio, Mustafà Afilal, había dicho que en el interior no había hecho obras importantes y que el material que se vio acumulado en la parte posterior de la finca era sólo por el cambio de unas baldosas. Algunos vecinos, en cambio, aseguran que habían visto cargar algún camión con material de desecho y que era habitual oír ruido de obras en el interior del edificio. Esta sospecha fue corroborada en la tarde del domingo por los heridos en el derrumbe de la casa, que aseguraron que se "habían hecho obras en la planta baja" y se lamentaban de la actuación del actual propietario.

El arquitecto municipal y los técnicos que han intervenido en la primera inspección han decidido que la casa número 3 de la calle de Sant Bonifaci, la más afectada, debería ser derruida totalmente. La número 1, que ya no tenía tejado, también. Mientras, se estudiará si es posible recuperar parcialmente la casa anexa, la número 5, aunque no se descarta que también deba derribarse porque la afectación estructural es importante.

El titular del juzgado número 4 de Igualada ha abierto diligencias para investigar las causas del hundimiento y las posibles responsabilidades.

El consulado de Marruecos en Barcelona inició ayer los trámites para repatriar a los cinco ciudadanos marroquíes que fallecieron el pasado sábado, una vez que han sido identificadas las cinco víctimas y se les ha practicado la autopsia.

El cónsul de Marruecos en Barcelona, Noureddine Khalifa, informó ayer de que los fallecidos son Abadedif Amrnis, de 33 años y natural de Alhoceima; Redoane Ajoot, de 22 años y natural de Tetuán; Adelasis Zoukouni, de 26 años, y su primo Zamal Zoukouni, de 21 años y ambos naturales de la ciudad marroquí de Khenifra, e Ibrahim Erramch, de 30 años y como los dos anteriores también natural de Khenifra. Adelasis Zoukouni y Erramch eran los dos únicos marroquíes que figuraban en el Ayuntamiento como empadronados en este domicilio, donde vivían de forma habitual 12 personas, algunas de los cuales apenas se conocían.