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Columna
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Ya está bien

Ya está bien de que los políticos despachen los escándalos urbanísticos diciendo que son casos aislados. En todos hay apaños compartidos. Sospechas que andaban de boca en boca. Dirigentes que miraron para otro lado y que ahora se sorprenden tras descubrir lo que ya sabían. Ya está bien de las distintas varas de medir. De pactos contra tránsfugas que nadie cumple y de brindis al sol que más calienta. De que Diego Valderas tenga que esperar a que un juez confirme la imputación del alcalde de Camas para expulsarlo. ¿Por qué Valderas no pidió su expulsión cuando, mientras pactaba acuerdos con el PSOE para impedir alcaldías del PP, Agustín Pavón cerró un pacto con los populares para ponerse él de alcalde? ¿Qué esperaba IU a partir de ese día de Pavón? Ya está bien de que IU pida la disolución del ayuntamiento de Marbella, donde no tiene representantes, y sin embargo apoyara a Pedro Tirado para auparlo a la alcaldía de Manilva y gestionara, sin rechistar, la delegación de Urbanismo hasta hace unos meses.

Ya está bien de que Julián Álvarez pida también la disolución del ayuntamiento de Marbella. Y de que la pida el día después de que sus tres concejales fueran despedidos del equipo de gobierno por presuntas prácticas de financiación irregular. ¿O es que Álvarez piensa que Carlos Fernández, que fichó por el PA tras la primera expulsión de la Cueva de Ali Babá, era lo que daba el marchamo democrático al ayuntamiento de Marisol Yagüe? Ya está bien de que el PA tenga siempre un concejal en el sitio inoportuno en el momento inadecuado. Y que vayan recogiendo, para engordar sus escuálidas filas, lo "mejor" de cada casa. Ya está bien de la vara de medir del PP, que sólo tiene centímetros para la ética de los demás, con concejales imputados en Camas y en otro municipio del Aljarafe sevillano. Con acuerdos con el GIL en Ronda y pactos que cerró en su día con ex gilistas en Estepona. Del PP que acudió a las elecciones municipales con lo más granado que había tenido Jesús Gil en cada municipio.

Ya está bien de que la Junta haga Planes de Ordenación del Territorio cuando hay alcaldes socialistas que no están dejando territorio alguno por ordenar. Y de eludir responsabilidades, a pesar de llevar 25 años legislando y los otros ninguno. De que el PSOE gobierne en Estepona con el apoyo del que fuera secretario general del GIL. Y que éstos mantengan el control real del urbanismo, a pesar de que era lo único que Chaves dijo que nunca aceptaría. ¿También será una sorpresa que ocurra algo en Estepona? Ya está bien de que el PSOE se rasgue las vestiduras en Manilva, cuando un concejal socialista era apoyo fundamental para garantizar la mayoría absoluta del alcalde hasta el mismo día que fue detenido por la policía con 770.000 euros en su casa.

Ya está bien de tragar con ruedas de molino. Y de que la salvación para Manilva sean dos partidos -IU y PSOE- que han formado parte del gobierno del alcalde preso. Y que además necesitan aliarse con el partido de un ex alcalde expulsado del PSOE por pactar con el GIL del mismo alcalde preso. Ya está bien de que debajo de Camas y detrás de la ballena blanca se escondan las cuentas corrientes de grandes empresas constructoras que siguen resultando anónimas. Ya está bien.

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