Touriño inicia el proceso para modificar el Estatuto de Galicia "dentro del marco constitucional"

El presidente de la Xunta, el socialista Emilio Pérez Touriño, dio ayer por iniciado el proceso para reformar el Estatuto de Autonomía de Galicia, que prometió mantener "dentro del marco constitucional". Antes de tramitar la iniciativa en el Parlamento gallego, Touriño va a pedir un informe jurídico al Consello Consultivo de Galicia sobre los aspectos susceptibles de modificación. El Gobierno gallego también quiere revisar la ley electoral autonómica para que el reparto de escaños no favorezca a las circunscripciones rurales, donde se concentra el voto del PP.

La reforma del Estatuto requiere el apoyo de al menos dos tercios de los 75 diputados del Parlamento autónomo, y el Gobierno de socialistas y nacionalistas sólo dispone de un diputado más que el PP, único grupo de la oposición. Los populares no han aclarado si consentirán en abrir los trabajos parlamentarios. La pasada semana, su presidente nacional, Mariano Rajoy, emplazó al Gobierno bipartito a que plantee antes un proyecto de reforma. Ayer, el líder del PP gallego y anterior presidente de la Xunta, Manuel Fraga, advirtió a Touriño, durante un debate parlamentario, de que podría "aplazar" su consentimiento a la reforma del Estatuto si PSdeG y BNG no renuncian a modificar la ley electoral en perjuicio del PP, que los partidos del Gobierno pueden reformar sólo con sus votos.

Touriño reafirmó ayer la promesa del Gobierno bipartito de plantear la reforma del Estatuto en los primeros seis meses de su mandato, que se cumplen en enero. El Ejecutivo se limitará a pedir al Parlamento la apertura del proceso, y serán los grupos socialista y nacionalista los que presenten sus propuestas por separado. El PSdeG asumió hace meses un documento encargado a juristas e intelectuales afines en el que se otorga a Galicia el carácter de nación y se propone crear un poder judicial y una agencia tributaria propias. En el acuerdo de Gobierno con el BNG, sin embargo, no aparece la palabra "nación", reemplazada por "comunidad nacional".

En su intervención ante el Parlamento, el presidente insistió en su compromiso de lealtad constitucional y anunció que, aunque el Gobierno como tal no presente una propuesta, encargará un informe previo al Consello Consultivo. La solicitud de ese dictamen no entusiasma a sus socios nacionalistas, que desconfían de un órgano designado en tiempos del Gobierno de Fraga. El vicepresidente de la Xunta y líder del BNG, Anxo Quintana, tampoco ha querido comprometerse a no hacer propuestas que sobrepasen los límites constitucionales. Sus objetivos son lograr el "reconocimiento de Galicia como nación" y el "blindaje de sus competencias", pero admite que el imprescindible consenso con el PP impondrá cesiones.