El Gobierno insta al PP a mantener la unidad contra ETA

El Gobierno reiteró ayer su voluntad de seguir trabajando hasta la desaparición definitiva del terrorismo, y ante las críticas del PP por una posible negociación con ETA, hizo hincapié en la necesidad de la unidad de los demócratas en esa lucha. Fuentes del Ejecutivo se expresaron así, en declaraciones a Efe, tras la explosión, la noche del sábado, de un coche bomba cargado con unos 15 o 20 kilos de cloratita en el polígono industrial de Vicolozano, en Ávila.

El PP, a través de Eduardo Zaplana, su portavoz parlamentario, y de Ángel Acebes, su secretario general, esgrimió este coche bomba como una prueba irrefutable de que el Gobierno "se equivoca con sus invitaciones al diálogo" como vía para acabar con ETA. "Mientras el Gobierno habla de paz, ETA pone coches bomba", resumió Zaplana en la sede de su partido en Madrid. Acebes visitó el lugar de la explosión para proclamar que "sólo estaremos a salvo de estos atentados cuando la banda terrorista sea total y completamente derrotada". El ex ministro subrayó que esta bomba es "buen ejemplo de cómo con los criminales no valen las ofertas para dialogar" y el único "modelo para acabar con ellos es derrotarlos".

Las fuentes del Gobierno rechazaron contestar directamente a estas acusaciones e hicieron hincapié en que, en momentos como éste, es más necesaria que nunca la unidad de los demócratas en la lucha contra el terrorismo. Una lucha que, aseguraron, se mantendrá hasta el fin definitivo de la violencia.

Las mismas fuentes se remitieron al comunicado hecho público por el Ministerio del Interior, en el que se reiteraba el "inquebrantable propósito" del Gobierno de seguir trabajando hasta la "desaparición definitiva del terrorismo".

El coche bomba ocasionó daños a dos empresas vinculadas a Aurelio Delgado, cuñado del ex presidente del Gobierno Adolfo Suárez, aunque fuentes de su familia aseguraron ayer que nunca habían recibido amenazas de ETA. En el mismo polígono, junto a las naves afectadas, se encuentra un almacén de la compañía de servicios postales DHL-La Guipuzcoana, que también sufrió daños, aunque menores, lo que hizo pensar inicialmente a algunos empresarios que pudiera tratarse de una extorsión de la banda. El subdelegado del Gobierno en Ávila, César Martín, descartó ayer rotundamente que el atentado fuera contra alguna empresa en concreto.

Trabajar en otra nave

El polígono de Vicolozano intentará volver hoy a la normalidad.

No todos los trabajadores podrán volver a sus puestos de trabajo, porque las instalaciones de la empresa de software informático Matchmind, la más perjudicada, quedaron destrozadas y aún están siendo desescombradas por los bomberos. De esta sociedad es consejero Carlos Delgado, hijo de Aurelio Delgado. Los discos duros de los ordenadores de Matchmind podrán ser recuperados, aunque las salas de la planta baja están destrozadas, por lo que la actividad se reanudará en otra nave próxima, adonde se trasladarán los 50 trabajadores.

También ha sufrido daños, sobre todo en fachadas y cristales, la planta de impresión de Imcodávila, que preside Aurelio Delgado, que tira 300 cabeceras de diferente periodicidad. El atentado obligó a los responsables de esta sociedad a realizar cambios importantes para que varios diarios pudieran estar ayer en la calle. Así, La Gaceta Regional de Salamanca y Diario de Ávila se tiraron en la capital salmantina, Diario de Soria, en Pamplona, y El Adelantado de Segovia, en Plasencia. No obstante, ni las rotativas ni los sistemas informáticos sufrieron daños, por lo que la actividad de la planta de Imcodávila ya ha sido reanudada, informan Carlos de Miguel y Aurelio Martín.

DHL-La Guipuzcoana y otras empresas tendrán que reponer cristales y ventanas, así como restaurar sus fachadas.