El PSOE de Almería denuncia "el mayor pelotazo urbanístico" en los terrenos de la vieja térmica

El PSOE de Almería denunció ayer en el pleno municipal el "mayor pelotazo urbanístico" en la historia de la capital que propiciará la construcción de 10 torres de 9 plantas -el PGOU sólo permite bajo más siete- en los antiguos terrenos de la central térmica, frente al mar. Los socialistas censuraron el "trato de favor" a la promotora Compañía Europea de Finanzas. El concejal de Urbanismo, Juan Megino (Gial), aseguró que autorizó la construcción de bajo más 9 para afrontar los "altos costes" del desmantelamiento de la térmica e invitó a la oposición a llevar el caso a los tribunales.

De los 33 puntos en el orden del día uno de los más polémicos fue el de los terrenos de la antigua térmica, donde todos los grupos de la oposición votaron en contra. El Plan Especial de Reforma Interior (PERI) promovido por la empresa Compañía Europea de Finanzas fue calificado por el principal partido de la oposición como "el mayor pelotazo urbanístico de la historia de Almería". El punto debatido consistía en dar luz verde a la construcción de 10 torres de 9 plantas cada una frente al mar y junto al Auditorio Municipal Maestro Padilla. El portavoz del grupo municipal socialista, Martín Soler, lamentó que la edificación que Megino defiende en este lugar "ya no se hacen ni en Benidorm" y acusó al responsable urbanístico de cometer un "fraude de ley". Soler insistió en que este concejal vendió los 6.350 metros cuadrados -el 10% de los 63.000 metros cuadrados de parcela- por cinco millones de euros, en lugar de haberlo hecho por 11,5 millones aplicando el precio del mercado. "A sus amigos de la compañía Europea de Finanzas con los que permutó el edificio de Trino les ha vendido el 10% de las cesiones de edificabilidad de ese suelo valorándolo por debajo del mercado y no les ha cobrado el IVA. Se las ha vendido al propio promotor por 5,6 millones de euros y no les ha cobrado el IVA. Y además el Ayuntamiento ha ejecutado con fondos propios un colector y una obra de saneamiento que le correspondía directamente al propio promotor en el plan parcial", expuso Soler.

El único concejal y portavoz de IU, Diego Cervantes, censuró con propaganda de la promotora en mano fechada hace dos años y en la que podía comprobarse que esta empresa ya pensaba entonces en ofertar 9 plantas, antes de que el pleno del Ayuntamiento diera luz verde a algo que estaba consumado. "He comprobado por una amiga que los pisos de allí, un noveno, vale 92 millones y que ya no quedan disponibles. Ni siquiera está aprobado y hoy lo llevamos a pleno", dijo Cervantes.

El edil de Urbanismo invitó a los grupos de la oposición a denunciarlo en los tribunales si consideran que ha favorecido con algún aprovechamiento a la empresa Compañía Europea de Finanzas. Megino se defendió de las acusaciones de "trato de favor" hacia la promotora de las viviendas. "Supone un aumento del número de alturas, pero no de la edificabilidad, lo que posibilitará disponer de más espacios libres y un entorno más diáfano. Hubo que darle más alturas para asumir las cargas del desmantelamiento de la térmica, cuyos costes eran altos", se justificó el edil. El concejal dijo también que "ningún asesor jurídico esgrimió razones legales para cargarle a la empresa el coste del colector, que iba a prestar servicio a toda La Vega", remachó.

En relación con la aprobación del avance del PGOU tanto IU como PSOE coincidieron en considerar que la propuesta del gobierno municipal no solventa los problemas actuales de la ciudad y que responde "a intereses privados y de promotores".

También hubo polémica en el punto sobre la aprobación provisional de los estatutos por los que debe regirse la Gerencia Municipal de Urbanismo, que llevó más de hora y media de debate. Diego Cervantes pidió al concejal de Urbanismo una limitación de sueldo para la persona que se encargue de la gerencia y evitar que cobre "más que el alcalde". Cervantes reprochó que desde Urbanismo no se haya negociado con los sindicatos o que el propio concejal se negara, cuando ejercía como alcalde el socialista Fernando Martínez, a la creación de una gerencia similar. Desde el PSOE se criticó que la presidencia de la comisión ejecutiva de la gerencia recaiga sobre el propio edil de Urbanismo, además de la vicepresidencia.

El pleno no estuvo exento de tensión e incluso insultos entre concejales. La edil Pilar González de Pradas, del grupo mixto y ex militante de GIAL, llamó a Megino "machista, prepotente, soberbio y charlatán de feria". El edil de IU se sintió ofendido por unas manifestaciones de Megino en las que éste interpretó que le llamaba "totalitario". Al pedirle al alcalde la retirada de esta calificación, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador contestó que "el comunismo no es una ideología democrática".