"Luxa ha escogido el peor país para aplicar su teoría"

Todo en orden. Los titulares, tras media hora de carrera continua, aunque suave, para recuperarse del partido de la UEFA, ya estiraban. Los reservas jugaban diversos partidillos en campo reducido. Y, con todo en orden, Miguel Ángel Lotina, técnico del Espanyol, se marchó a ver el vídeo que le había preparado la secretaría técnica. Quería analizar, una vez más, el sistema de Wanderlei Luxemburgo, del Madrid, su rival de hoy en Montjuïc. Y siempre con la misma idea: "Encontrar sus defectos para exprimir las virtudes de mi equipo". Así, ayer, Lotina ya tenía hechos los deberes y pudo dar la clase teórica a sus jugadores. Con dos metas: "Explicarles cómo ganar al rival y cómo el rival no te va a ganar".

Suele decir el técnico que le es indiferente el equipo al que se mida, que no piensa variar la filosofía de juego que lleva practicando desde que llegó y que lo más importante es no perder la personalidad. El sistema lo tiene decidido, el 5-2-2-1 que ha instaurado desde hace dos semanas. Aplicado en parte por la ausencia del central lesionado Pochettino, en parte porque considera que es el ídoneo para los jugadores de que dispone. "La cosa más fundamental y complicada del fútbol es saber sacar a los jugadores el máximo rendimiento posible", argumenta Lotina. Y abunda: "Soy de esos que opina que el sistema no lo decide el técnico, sino que lo determina las características de los futbolistas que posees a tu mando".

No parece pensar lo mismo Luxemburgo, que, indistintamente de los futbolistas que le llegan, siempre ha mantenido que su equipo va a jugar sin extremos y con el cuadrado mágico. "Luxa ha escogido el peor país para aplicar su teoría. Últimamente parece que en España sólo existe el 4-2-3-1", defiende Lotina. Y añade: "Si tiene jugadores para jugar así, puede hacerlo perfectamente. Se habla mucho del Madrid, pero el Villarreal también deja las bandas para los laterales y las diagonales de los puntas y nadie dice nada". Es un sistema ofensivo que deja desguarnecida a la defensa cuando los laterales se suman al ataque. "Puede beneficiarnos porque nuestro sistema otorga libertad a los del medio y porque también permite que los carrileros suban tranquilos; saben que dejan a tres centrales por detrás", analiza Lotina. Pillarle al Madrid al contragolpe es una de las armas que ha trabajado el Espanyol. No así las faltas y las jugadas ensayadas o de estrategia, el punto débil del Madrid. Aunque así le marcó el Cádiz, el Celta y el Lyón por partida doble, Lotina no le da importancia. "Se puede ganar o perder un partido por una falta, pero hay aspectos más importantes en el fútbol", sentencia. Le preocupa, sin embargo, ceder demasiados metros al Madrid. "Aunque es importante que Ronaldo no tenga espacios, meterte atrás contra este equipo es muy problemático; si sólo pensamos en que no nos hagan cosas, aparecerá el que menos esperas".

Lotina, pues, aboga por el equilibrio entre la defensa y el ataque: "Nuestro sistema trata de compensar todas las líneas. Los tres centrales guardan la de atrás, los del medio tienen una libertad comedida y tres o cuatro llegan siempre arriba. Es importante tener presencia en ataque". Pero, a pesar de las múltiples líneas que trace sobre la pizarra, de la táctica que emplee, de las ausencias de Tamudo, Pochettino, Zabaleta y Juanfran, Lotina tiene claro cómo ganarle al Madrid: "Con una pizca de suerte".