La OTAN tomará el mando de las operaciones en Afganistán en un año
España no participará en misiones de combate contra los talibanes
La OTAN prevé hacerse cargo del control de la seguridad de todo Afganistán dentro de un año, y ello obligará a coordinar las operaciones que la Alianza realiza ahora para la estabilización de Afganistán (Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad, ISAF) con la comandada por EE UU para combatir los restos del régimen talibán. Los ministros de Defensa de la OTAN se pusieron ayer de acuerdo en establecer las sinergias entre ambas, pero dejaron para más adelante la exacta definición de su estructura de mando.
Ese mando único de ambas misiones en Afganistán no corresponderá a EE UU, aunque sus tropas seguirán respondiendo ante el jefe supremo aliado, el general norteamericano James Jones. Fuentes aliadas señalaron que "se está muy cerca de un acuerdo, y ahora se busca el lenguaje para que todas las partes se sientan satisfechas". Lo que afirman las fuentes es que Estados Unidos está dispuesto a someter la operación Libertad Duradera -contra los talibanes- al mando de la OTAN en un año.
Presente ahora en el norte y oeste del país, la ISAF extenderá hacia el sur sus actividades de reconstrucción y estabilización la próxima primavera y culminará el despliegue en otoño de 2006 en el este del país, el núcleo de los talibanes, según fuentes aliadas. Países como Reino Unido, Canadá, Holanda y el propio Estados Unidos están dispuestos a actuar en el sur y en el este en operaciones de combate, mientras España y Alemania se niegan y seguirán en otras zonas. La llegada de la OTAN no supondrá el fin de la Operación Libertad Duradera, esencialmente de combate, que encabeza Estados Unidos. España, Francia y Alemania mantienen que ISAF y Libertad Duradera son dos misiones distintas que no deben ni fusionarse ni confundirse, sino coordinarse porque el objetivo final es el mismo: consolidar Afganistán como un Estado viable y fiable.
Dos cadenas de mando
"Debe haber dos cadenas de mando distintas, que actúen conforme al mandato de la ONU, que acaba de pedir que las dos misiones sigan trabajando en estrecho contacto", dijo ayer el ministro de Defensa, José Bono. "Hay que coordinar las cadenas de mando". Otros países, encabezados por Estados Unidos, prefieren un mando único. A la aparente discrepancia le quitó hierro el secretario de Defensa de Estados Unidos, Donald Rumsfeld: "Mucho ruido y pocas nueces".
El plan de coordinación de las dos misiones será presentado en octubre por los responsables militares de la Alianza. La estructura que está tomando forma prevé un mando único de ISAF para todo Afganistán del que dependerán dos: uno dedicado a las operaciones de estabilización, en las zonas ya seguras del país, y otro de seguridad, bajo mando de Estados Unidos, en el que la reconstrucción vaya acompañada de operaciones de combate para las regiones de más riesgo, el sur y, sobre todo, el este. "Los países podrán elegir dónde y cómo intervienen", señalaron fuentes aliadas. Bono subrayó que España no irá de ninguna manera al sur.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.