Fenosa quiere participar en la compra de activos tras la OPA de Gas Natural

El presidente de la compañía eléctrica Unión Fenosa, Antonio Basagoiti, aseguró ayer en Oviedo que su compañía tiene interés en participar en la compra de aquellos activos de los que Gas Natural pudiera desprenderse si se consuma la OPA (oferta pública de adquisición) que ha lanzado sobre Endesa, la primera eléctrica española. Las resonancias políticas de la operación se trasladaron ayer al Congreso, donde los populares acusaron al Gobierno de conocer de antemano la operación, y solicitaron la intervención de Bruselas, término que la comisión no considera necesario.

Como parte de la operación, Gas Natural suscribió un pacto con Iberdrola, la segunda compañía eléctrica española, en virtud del cual se compromete a vender a ésta aquellas instalaciones de generación y distribución que las autoridades de la competencia pudiera obligarles a enajenar, de hacerse con el dominio de Endesa, para no incurrir en una posición de dominio en el mercado. Antonio Basagoiti, presidente de la tercera eléctrica de España, sostuvo ayer que su empresa también quiere, "por supuesto", comprar parte de esos activos, porque tiene voluntad de crecer. La eléctrica Energías de Portugal (EDP), propietaria de Hidrocantábrico, cuarta eléctrica española, expresó días atrás su rechazo al acuerdo entre Gas Natural e Iberdrola y exigió poder concurrir a la adquisición de parte de los activos que pudieran ser enajenados.

El presidente de Unión Fenosa sostuvo que su empresa "no va a interferir" en la OPA de Gas Natural sobre Endesa, pero reiteró lo que hace una semana ya manifestó la compañía en un comunicado: "Queremos saber cuáles son las reglas del juego. Nos parece que los principios de incrementar la competencia, de dar muchas opciones al consumidor y de que todos los procesos se hagan transparentes son fundamentales, pero nosotros no entramos en la operación entre dos entidades ni tenemos por qué opinar sobre ella", indicó Basagoiti. No se pronunció sobre el posible interés de EDP por hacerse con el control de Unión Fenosa.

Fabulaciones políticas

El rifirrafe político que ha levantado la OPA de Gas Natural tuvo ayer un nuevo episodio en el Congreso. El ministro de Industria, Turismo y Comercio, José Montilla, respondió, durante su comparecencia ante la Comisión de Industria, a las acusaciones, formuladas por el portavoz de Economía del PP, Vicente Martínez Pujalte, de que él conocía de antemano la operación y que ésta figuraba en uno de los puntos de acuerdo del tripartito catalán. Montilla reclamó al PP que dejen de "fabular y de politizar" sobre una operación "puramente empresarial". El responsable de Industria rechazó que desde su partido fueran "clarividentes", y apuntó con ironía: "Ya sabíamos que ustedes iban a perder las elecciones, que iba a ser ministro, que María Teresa Costa iba a presidir la CNE y que La Caixa estaba preparando una OPA". Montilla recordó que el Gobierno está obligado a dar una opinión al final del proceso y que, mientras tanto, "será escrupuloso con la legislación vigente". Además, aseguró que el Gobierno "hará prevalecer los intereses generales, tratando de no confrontar los territorios y de ser lo más comedidos posible". Más tarde, durante la sesión de control al Ejecutivo, el ministro aseguró que la competencia y los precios "no dependen del número de operadores que confluyen" en un sector regulado como el de la energía.

El portavoz del PP en el Congreso, Eduardo Zaplana, pidió ayer al vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, que las autoridades comunitarias se pronuncien sobre la OPA. El ministro respondió que "dado que ambas compañías realizan sus actividades en España", más de dos tercios, "la operación será analizada por los órganos de competencia nacionales". La Comisión Europea confía plenamente en el análisis que hagan las autoridades españolas sobre la OPA, informa Andreu Missé desde Bruselas. El portavoz de Competencia de la Comisión Europea, Jonathan Todd, reiteró que corresponde a España el análisis de la operación, pero que si "las autoridades españolas recababan un análisis o un dictamen de la Comisión Europea estarían encantados en hacerlo".

Endesa solicitó ayer a la Comisión Nacional de la Energía (CNE), regulador que también debe pronunciarse sobre la OPA, ser considerada "parte interesada" en el expediente. La eléctrica que pretende Gas Natural podría así formular alegaciones y presentar documentos.

El banco de inversión Merrill Lynch opina en un informe sobre la operación que, si bien "tiene unos sólidos méritos estratégicos", cuenta con "dos importantes debilidades": el precio "infravalora significativamente a Endesa" y la venta de activos a Iberdrola plantea problemas de competencia, ya que "concentra el poder en manos de dos operadores".