"A los alcaldes los eligen para que gobiernen su ciudad"

Evangelina Naranjo (Sevilla, 1967) asegura que la ley que permitirá a los ayuntamientos regular el botellón refleja lo que los alcaldes pedían. Está abierta al diálogo, pero advierte de que la Junta no está para gobernar los municipios cuando los alcaldes no quieran hacerlo.

Pregunta. ¿Está satisfecha con la reacción de los alcaldes al borrador de la ley?

Respuesta. Por el momento, sí. No olvidemos que esto nace de de un acuerdo de la mesa de concertación. Nos lo propuso la FAMP y hemos cumplido el compromiso, en la fecha y en el fondo.

P. ¿Es la ley que pedían?

R. Efectivamente. Pedían competencias para poder regularizar el consumo de comidas y bebidas en la vía pública. Pedían la prohibición de estas actividades y concentraciones en los pueblos y ciudades. Ya está hecho. Hay por ahí gente que quiere dos huevos duros más, pero para esto y para cualquier cosa que hagamos.

P. Algunos alcaldes han criticado que se cargue la responsabilidad a los ayuntamientos. ¿Había otra forma de hacerlo?

R. No se carga ninguna responsabilidad a los ayuntamientos que no tengan por la Constitución o a través de la Ley de Base del Régimen Local. Quien diga lo contrario miente. Y nadie puede acusarnos de dejación de funciones. El borrador prohíbe expresamente el consumo de comidas y bebidas en espacios públicos, salvo en los lugares que autoricen los municipios. ¿Qué responsabilidad tienen los ayuntamientos? Lo que no se nos puede olvidar es que los ciudadanos eligen a sus alcaldes para que gobiernen sus ciudades, no para que lo hagan otras administraciones públicas.

P. ¿Se refiere a que presionan para que sea el Gobierno andaluz el que tome la medida impopular de prohibir beber en la calle?

R. Todos. Pero nosotros ya lo hemos hecho. El borrador ya asume esa medida impopular, pero lo que no vamos a hacer es gobernar los ayuntamientos en aquellos temas que a los alcaldes no les interese gobernar.

P. ¿La ley criminaliza el botellón?

R. No, en absoluto. Ni el botellón ni a los jóvenes.

P. ¿Van a consultar a los jóvenes como piden algunos colectivos?

R. Esa función es de los ayuntamientos. Yo he dicho que la regularización que los ayuntamientos hagan debería tener el consenso de las partes afectadas en cada municipio. Nuestra misión no es la de hacer un texto que recoja todas las medidas del botellón, no vamos a hacer una ley para decir que hay que hacer siete conciertos de música y cuatro festivales de teatro. Esa no es nuestra función ni es lo que se nos pidió en la mesa de concertación. Lo que pasa es que hemos cumplido con la FAMP, con los empresarios, con las entidades sociales y con cientos de andaluces que nos escriben a diario para decirnos que sufren la falta de conviviencia entre el botellón y su descanso. Y hay alguien que se ha asustado cuando ha visto que hemos cumplido.

P. Muchos alcaldes dicen que no tienen recursos para aplicar la ley. ¿Es cierto?

R. Depende de cada municipio. Muchos los han tenido, los tienen y los tendrán. Hay otros sobre los que no me atrevo a pronunciarme, pero hay algunos de los que ni siquiera tengo que contar porque conozco perfectamente los medios, las cuentas y los efectivos.

P. ¿El Ayuntamiento de Sevilla tiene medios?

R. El Ayuntamiento de Sevilla tiene medios para aplicar la ley.

P. Varios alcaldes han pedido a la Junta ayuda económica para aplicar la ley y buscar alternativas de ocio. ¿Se lo plantea?

R. Sí, claro, piden por todo. Eso es hacer política desde el cinismo. Pero no hay ninguna ley en todo el Estado que contemple estas medidas, incluidas las siete comunidades autónomas gobernadas por el PP que prohíben el consumo de alcohol en la vía pública, que tenga ni un solo céntimo de euro para financiar a los ayuntamientos. Cuando, además, todos le dan la responsabilidad a los ayuntamientos para que en sus ordenanzas lo regulen. Es una ley que no tiene por qué llevar acompañamiento financiero. Las competencias de orden público y de ocupación de vía pública son de los municipios. No pretenderá algún alcalde que la Junta pague un concierto, la retirada de los contenedores o la apertura de una piscina municipal.

P. ¿Se estudiará que los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado colaboren en las labores de control del consumo de alcohol?

R. Esa no es mi competencia, pero en la mayoría de los municipios la policía local está capacitada para hacerlo. Desde la unidad adscrita de la policía a la Comunidad Autónoma ofrecemos servicios a los municipios con recursos más escasos y en aplicación de la Ley de Drogodependencia controlamos la venta de alcohol a partir de las diez de la noche. Pero no le pidan peras al olmo.

P. ¿Le gusta tener que haber redactado esta ley?

R. Este era mi posicionamiento cuando yo era delegada del Ayuntamiento de Sevilla [muestra una copia de un teletipo de marzo de 2002]. A mi me gusta la coherencia y decir siempre lo mismo, esté donde esté. Y en 2002, siendo delegada de Medio Ambiente de Sevilla, decía lo mismo que ahora: 'Naranjo apuesta por una regularización del consumo de alcohol en la calle y reclama la aprobación de una ley, ya sea estatal o autonómica'. No tengo ningún complejo de que hayamos adoptado esta medida. Por contra, en la misma época, cuando se gobernaba en otro sitio, el señor [José] Torres Hurtado afirmaba [saca otro teletipo de enero de 2002] que los efectos de la movida 'son una competencia en su inmensa mayoría municipal, por no decir al 100%, ya que atañen al cumplimiento de las ordenanzas'. Tengo que recordar que era delegado del Gobierno en Andalucía. Yo entendía y entiendo que los ayuntamientos tienen los instrumentos para regular el botellón, pero llegamos a un compromiso y hemos cumplido. La Junta ha tomado una decisión que no es fácil, pero eso es gobernar.