La autopsia descarta el homicidio en el caso del anciano hallado muerto en Ciudad Lineal
Francisco Javier Martín-Maestro, de 43 años, no acabó con la vida de su padre, Bernardino Martín-Maestro Santos, de 79 años. La autopsia ha descartado totalmente que el primero, que sufre problemas mentales, matase a su progenitor el pasado 16 de agosto, sino que éste falleció a consecuencia de diversos fallos en su organismo.
El Grupo X de Homicidios había detenido a Francisco Javier Martín-Maestro ese día, después de que éste llamase al 091 informando de que su padre estaba muerto en el interior de su casa en el número 79 de la calle de Nuestra Señora del Villar, cerca de la avenida del Marqués de Corbera, en el barrio de la Elipa.
Cuando los facultativos del servicio sanitario de emergencias acudieron al domicilio a petición de los agentes, comprobaron que el fallecido presentaba un golpe en la cabeza y que llevaba dos días muerto, ya que el cuerpo sufría una fuerte descomposición.
Tres denuncias
Bernardino Martín-Maestro, además, había denunciado en tres ocasiones a su hijo, con el que convivía en el citado inmueble, por agresiones y amenazas de muerte. Los vecinos aseguraron que Francisco Javier les había amenazado también en ocasiones y solía beber excesivamente.
A pesar de todo ello, los análisis post mortem descartan por completo el homicidio, por lo que Francisco Javier no se halla en prisión. Fuentes cercanas a esta persona destacaron ayer el "enorme daño causado" a Martín-Maestro, ya que "es una persona muy conocida en el barrio y que ha sido injustamente acusado de algo que nunca cometió".
"Es cierto que Francisco Javier se halla en tratamiento desde hace 20 años", puesto que es "un enfermo", pero "nadie le creyó cuando contaba lo que había ocurrido. Menos mal que ahora la autopsia ha puesto las cosas en su sitio, pero el daño está hecho".
"El problema", añaden estas fuentes, "es que ahora es señalado por todos los vecinos y que la reinserción va a ser muy complicada. Aún no ha vuelto a su vivienda, a pesar de que no acabó con la vida de su padre".
El fallecido, según los vecinos, era una persona que solía estar ebrio y no pagaba la comunidad de propietarios. A menudo daba grandes voces y molestaba al resto del vecindario. Adeudaba más de 7.300 euros a la comunidad.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Ciudad Lineal
- Hallazgo cadáveres
- Ancianos
- Personas desaparecidas
- Madrid
- Casos sin resolver
- Tercera edad
- Enfermedades mentales
- Comunidad de Madrid
- Casos judiciales
- Enfermedades
- España
- Medicina
- Sucesos
- Salud
- Justicia
- Sociedad
- Distritos municipales
- Ayuntamiento Madrid
- Ayuntamientos
- Gobierno municipal
- Administración local
- Política municipal
- Administración pública
- Política