Historia de una resurrección
La resurrección es la de la protagonista de Nocturno, la reciente novela de Gaizka Arostegi. Perteneciente a la red que se dedica a rescatar pilotos aliados durante la ocupación nazi en el País Vasco francés, Begoña, que había perdido a sus seres queridos en la bombardeo de Gernika, vuelve a la esperanza y a la vida tras ayudar a escapar al músico Hermann Stern, huido de Mauthausen.
La historia narra dos historias paralelas, a veces en capítulos alternos. En primer lugar, la atención se centra en el intento que la red de ayuda presta a Stern para llegar hasta el Consulado británico en Bilbao y dar a conocer así la barbarie del régimen nazi. En paralelo, el principal responsable de la persecución es Kurt Messner, quien en el pasado había tenido que ver con Stern, con lo que la historia bucea en sentidos personales: Stern, director de orquesta; Messner, prometedor pianista, enamorados ambos de la misma mujer.
El maniqueísmo en el tratamiento de los personajes no abandona una trama llevada con carácter cinematográfico: la última lucha en un puente recuerda a escenas de películas de la que son deudoras otras secuencias de la trama novelesca. Pero Gaizka Arostegi, tan irónico en la elección de los nombres de sus personajes, ha sido capaz de aunar afectividad sentimental en una trama convencional, aunque busca una lectura simbólica de la importancia de la música -metáfora de la armonía- en un mundo caótico.
El autor intenta una escritura limpia, con intentos de originalidad en la construcción de ciertas imágenes sensoriales, y el final de la novela, en su final tan previsto, acepta elementos melodramáticos y efectivos.
Gaika Arostegi: Nocturno. Ttarttalo. Colección Abra. San Sebastián, 2005. 276 páginas, 18,50 euros.
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