Interior abre una investigación tras morir un ladrón por un tiro de un policía en Madrid

La Dirección General de la Policía ha ordenado la apertura de una investigación interna para esclarecer la muerte de un peruano de 21 años, que recibió un disparo en la cabeza durante un forcejeo con un agente del Cuerpo Nacional de Policía que trataba de detenerle en una calle del distrito de Vallecas (Madrid). El agente, perteneciente a la Unidad de Intervención Policial, estaba fuera de servicio. Según fuentes de la investigación, el tiro que mató a la víctima, con numerosos antecedentes por robo, se disparó accidentalmente cuando otro delincuente agarró violentamente del brazo al policía.

Sobre las 22.15 del pasado jueves, cuatro agentes del Cuerpo Nacional de Policía de la comisaría de Puente de Vallecas realizaban un servicio de espera en torno a un coche Audi, matrícula 0762 CTF, estacionado en un callejón de la calle de Ramón Pérez de Ayala. El vehículo, sustraído a finales del pasado julio, había sido utilizado por una banda delictiva para perpetrar varios robos. Este potente automóvil había estado a punto de arrollar a varios agentes el pasado 27 de julio en la calle de Mendibil, en el distrito de Puente de Vallecas, cuando intentaban detener a sus ocupantes.

El pasado jueves, la policía localizó en un control rutinario al coche cuando estaba aparcado en un fondo de saco situado junto al número 104 de la calle de Ramón Pérez de Ayala. La comisaría decidió establecer en ese lugar una discreta vigilancia, ante la sospecha de que los atracadores, tarde o temprano, volverían a recogerlo para perpetrar un nuevo golpe.

A últimas horas de la noche, cuatro agentes formaban parte de ese dispositivo. Junto a ellos estaban un agente antidisturbios y otra compañera policía (ambos destinados en la misma comisaría) que, cuando se dirigían a Moratalaz, se encontraron casualmente con los que estaban realizando la troncha (espera) y decidieron pasar un rato con ellos.

Dos coches robados

En ese momento llegaron tres hombres en un Opel Astra, robado horas antes en un taller mecánico de Moratalaz. Uno de los sospechosos descendió del automóvil y se dirigió hacia el Audi aparcado en el callejón. Los agentes les dieron el alto al tiempo que exhibieron sus placas y carnés profesionales. El joven que acababa de ponerse al volante del Audi, salió del coche por el lado del copiloto, empujó a uno de los agentes y echó a correr hasta que fue capturado a unos 200 metros de distancia.

Casi al mismo tiempo, uno de los otros dos sospechosos que estaban dentro del Opel Astra salió del automóvil intentando huir. Según fuentes de la Dirección General de la Policía los integrantes del grupo delictivo ofrecían "una fuerte resistencia". El agente antidisturbios intervino entonces apoyo de los compañeros que estaban practicando la operación, logrando tener casi inmovilizado a uno de los supuestos delincuentes, que más tarde se comprobaría que se trataba de un peruano.

Sin embargo, el otro supuesto atracador se abalanzó contra el policía antidisturbios, propinándole un fuerte empujón en el brazo con el que sostenía su arma reglamentaria. En ese momento "se produjo un disparo accidental que alcanzó mortalmente" al otro sospechoso, según fuentes de la Dirección General de la Policía.

La bala le penetró por el occipital derecho, cerca de la oreja, según ha determinado la autopsia médico forense. "Aparentemente es un caso claro de mala suerte", dijo un mando policial, pese a lo cual la investigación interna tratará de aclarar todos los aspectos del caso.

La Brigada Provincial de Policía Científica de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, ha identificado al joven fallecido. Se trata de Israel Miguel G. Chapillicuen, de 21 años y natural de Lima (Perú), en cuyo historial constan siete antecedentes policiales: tres por robos con violencia, dos por robos y hurto de vehículo de motor y por hallarse irregularmente en España. Esta persona utilizó otras dos identidades falsas, según consta en los archivos policiales, con las que figura reseñado por un atraco y otros dos hurtos.

Los otros dos detenidos son Oswaldo Patricio Wintimilla Ramos, de 19 años, ecuatoriano, al que le constan tres detenciones por robo con violencia o intimidación y uno por robo de vehículo a motor; y Alexander Mario Díaz Remacho, de 21 años, español, al que le constan 13 antecedentes por atracos, robos de vehículos, hurtos, estafas y lesiones.