Regar tras la lluvia
¿Cuál es el motivo de regar las calles de Madrid? A mí se me ocurren varios a priori, pero tras un día y una noche de lluvias, como el miércoles 10 de agosto, ninguno.
El caso es el que jueves por la mañana, y tras comprar el diario, me encontré con un camión que arrojaba litros, miles, sobre una calle ya mojada y limpia. Hilarión Eslava es la calle y se convirtió en una improvisada gincana, tras formar considerables, pestilentes e inútiles charcos. Yo tuve suerte porque soy joven y, calculando trayectorias, soy un as. Pero no tuvo tanta suerte una parejita de mayores que compartía acera conmigo: recibió una recia y negra ola de miasma impunemente. Si es que los viejos no deben salir cuando hay escasez de agua. Así nos luce el pelo.
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