El jefe del retén de Guadalajara pidió ayuda al verse rodeado por el fuego antes de morir
Castilla-La Mancha denuncia la existencia de un coche que perdía gasolina cerca del incendio
El jefe del retén que murió abrasado en el incendio de Guadalajara el pasado 17 de julio sólo tuvo tiempo para hacer una llamada de socorro antes de la explosión que acabó con la vida de 11 de los 12 miembros del equipo. Pedro Almansilla, de 54 años y amplia experiencia en la lucha contra el fuego, llamó a un voluntario de otro retén pidiendo ayuda porque estaba rodeado por el fuego. Éste llamó al 112 a las 17.33.02. Menos de un minuto antes, ya había llamado Jesús Abad, el único superviviente del retén, alertando de la explosión. El registro figura en un informe que la Junta de Castilla-La Mancha envió a la comisión de investigación autonómica. Una persona alertó de que un coche perdía gasolina el día en que prendió el fuego.
El informe de las llamadas recibidas en el teléfono de emergencias 112 describen una situación angustiosa. Jesús Abad llamó desde un móvil a las 17.27.14 del domingo 17 de julio. "Solicita que se le saque del incendio. Indica que se ha quedado atrancado con el camión de bomberos. Solicita que se contacte con sus compañeros aunque no confirma dónde e informa de que ellos han salido corriendo y a él no le ha dado tiempo". En ese momento, el fuego bajo la ladera ya ha lanzado una violenta explosión ladera arriba que los expertos llaman erupción del fuego. Abad llamó inmediatamente a la Guardia Civil pidiendo ayuda.
A las 17.33.02 un voluntario de otro retén, Víctor Morales, telefonea al 112 y pide que llamen por teléfono a Pedro Almansilla. Afirma que éste le ha llamado explicándole que está atrapado por el fuego "y que hay al menos 15 personas con él". Un voluntario de un retén que iba detrás del siniestrado llama al 112 a las 17.37.29 y explica que hay un retén atrapado por el fuego. "Informa de que ellos iban detrás pero que se han dado la vuelta al reavivarse el fuego", según el resumen de las llamadas, que ha sido enviado a la comisión de investigación del incendio.
A las 17.39.14, Jesús Abad ya explica que tiene "costillas rotas" y añade que "el camión está ardiendo, que él va a pie y que hay mucho humo aunque el fuego ha pasado de su zona". A las 17.53.39, Abad llama de nuevo y explica el dramático panorama: "Se ha encontrado con los dos Land Rover del retén y dos camiones. Indica que los vehículos están calcinados y que hay al menos tres cadáveres en el camino".
A las 17.55.24, el superviviente comunica "que no le quedan fuerzas para seguir". Casi tres cuartos de hora más tarde, Abad es evacuado y el jefe de extinción forestal avisa de que "al parecer hay 14 muertos". A las 19.54, se pasa al nivel 2 de emergencia, que permite contar con coordinación del Ministerio de Medio Ambiente. A las 20.47.13 la policía local de Ronda (Málaga) llama pidiendo información porque está con la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona. El 112 les remitió al gabinete de prensa de la consejería.
El informe, de 43 folios, resalta cómo el día antes de la muerte del retén, durante las primeras horas del fuego, la Junta de Castilla-La Mancha ya había pedido aviones y medios terrestres al ministerio, a Castilla y León y a la Comunidad de Madrid, que a las 23.45.10 "dice que no atiende la petición". En esas primeras horas, muchos vecinos llamaron quejándose de que no había medios para frenar el fuego. La tarde del domingo, la mujer del alcalde de Villarejo de Medina llama para decir que el fuego se acercaba al pueblo y que sólo los vecinos luchan contra él. El informe también detalla los problemas que sufrieron los medios aéreos: Varios de ellos perdieron la carga y uno de ellos chocó con un buitre. El fuego devoró 12.000 hectáreas.
Entre las llamadas más desconcertantes figura la que realizó una vecina de Santa María del Espino, a las 16.30.19. "La alertante informa de que han pasado por la carretera y hay un coche con un manguito suelto, está cerrado echando gasolina y no hay nadie", según el informe. Su hermana toma entonces el teléfono y declara que el coche, un Renault 5 del que dio la matrícula, "tiene el faldón roto" y añade "que habrá ido por los caminos", según el informe. El 112 alertó a la Guardia Civil del hallazgo y dice que la mujer "cree que ha podido ser el causante del incendio". A las 16.36.19, la Guardia Civil replica que "no es nada porque ya han identificado a los autores, que son de una barbacoa".
La Junta de Castilla-La Mancha envío ayer un escrito al juzgado que investiga el origen del incendio por si puede abrir una línea de investigación, informa Isabel Salvador. B. C., padre de las denunciantes, explicó a este diario que "lo más probable es que se tratase de un coche averiado". El padre, agricultor y ganadero de 59 años, estuvo ese día en el origen del fuego ayudando con su tractor. "Nada es seguro, pero no creo que el coche tuviese que ver con el origen del fuego. A la zona del coche no llegó el fuego. Supongo que alguien se rompió los bajos por los caminos. Más tarde el coche no estaba".
Fuentes del Gobierno regional explicaron que la gasolina pudo ayudar a propagar el fuego aunque no fuese el origen. El PP, que ha pedido las cintas íntegras y no un informe sobre ellas, denunció que el coche de la gasolina "es una cortina de humo de la Junta para no hablar de la extinción".
