El redescubrimiento de Perceval

Son muchos los que sólo han oído hablar del movimiento Indaliano de puertas para adentro de la provincia de Almería. Poco o nada se conoce más allá de Despeñaperros o de Sierra Nevada. Quizá el momento, la posguerra española, y el lugar, una Almería situada muy lejos de la pujanza económica de que hoy goza, no fueron los mejores aliados para que el trabajo de estos artistas traspasar los límites de la provincia. A pesar de todo, el Índalo se ha convertido en símbolo de Almería.

Pero la plasmación de esta corriente en el ámbito de la pintura existió. Su líder indiscutible fue Jesús de Perceval (Almería, 1915-1985) quien, en torno a una tertulia iniciada en 1945 en la que participaban otros artistas e intelectuales, tomó el índalo como icono. El movimiento Indaliano vivió poco tiempo después, a principio de los años cincuenta, sus años de gloria y éxito.

Bajo esta corriente pictórica se incluye a los artistas Francisco Alcaraz, Miguel Cantón Checa, Luis Cañadas, Francisco Capuleto, Antonio López Díaz y Miguel Rueda. Por vez primera un Ayuntamiento de la provincia, en este caso Roquetas de Mar, se ha atrevido con una exposición -la más importante realizada sobre este movimiento pictórico del siglo XX español- que reúne obras de todos sus componentes.

Pero Roquetas, que duplica estos días su población de derecho (70.000 empadronados) ha dado un salto cualitativo con la antológica de los indalianos al aportar, en una segunda exposición, la obra inédita de Perceval como fotógrafo.

El comisario de ambas muestras, Juan Manuel Bonet, ha querido reservar un espacio diferente al Perceval fotógrafo al reconocer la fascinación que estas instantáneas transmiten al espectador. Se trata de 66 fotografías que "reivindican" la fotografía callejera, la de imágenes robadas al día. No en vano, la selección de las realizadas en el barrio de La Chanca, redescubren la pobreza con la misma dignidad con la que también lo hicieron Carlos Pérez Siquier, con sus fotografías, y Juan Goytisolo, desde la escritura.

Según Juan Manuel Bonet, ex director del Centro de Arte Reina Sofía de Madrid, la cámara de Perceval recogió bodegones rústicos "a lo Irving Penn", abstracciones aéreas "a lo Lucio Fontana" e imágenes de algún que otro rodaje en Almería. Además, pueden verse retratos familiares, fotos de estudio con modelos, paisajes áridos, pueblos blancos y fiestas populares andaluzas, entre otras instantáneas.

"Mostramos así un territorio casi virgen y, desde luego, muy poco conocido, del trabajo del pintor almeriense e indaliano Jesús de Perceval e incorporamos su nombre a la historia de la fotografía española del siglo XX. Perceval pertenece a una familia fronteriza, la de los pintores-fotógrafos, que cada día que pasa despierta mayor interés", concluye Bonet.