"Los políticos tienen que devolver RTVE a los ciudadanos"

Carmen Caffarel (Barcelona, 1953), doctora en Lingüística Hispánica, lleva 16 meses el frente de RTVE y aventura que abandonará el cargo para reincorporarse a la Universidad cuando sea elegido el nuevo director general. Consciente de que fue llamada por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para pilotar la transición de RTVE, observa la reforma aprobada el viernes por el Consejo de Ministros como "un momento histórico que marca un antes y un después". "Nos ponemos a la altura del siglo XXI", afirma.

Pregunta. ¿Qué sensación le produce ser la última directora general de RTVE nombrada por el Gobierno?

Respuesta. En la medida en que soy la última, quiere decir que los próximos van a ser elegidos por un órgano independiente del Gobierno. Sabía que esto iba suceder y estoy contenta, porque he aportado mi pequeño grano de arena. Aunque no me ha tocado un momento fácil.

"El Parlamento definirá el marco estructural de la casa. Me gustaría que la ley fuera de consenso, con un gran respaldo político"

"La elección del director general por el Consejo de Administración es una forma de garantizar la independencia de RTVE"

P. ¿Le parece acertada la nueva fórmula de elección, a cargo del consejo de administración?

R. Siempre he defendido una radiotelevisión pública que sea de los ciudadanos, no de los partidos de turno que sustentan a los Gobiernos. El perfil de los consejeros será el de personas solventes y capacitadas nombradas por las Cortes. Y además será paritario, lo que dice mucho de la sensibilidad del Gobierno. Ellos elegirán al director general entre los diferentes currículos que se presenten. Es una forma de garantizar la independencia de RTVE.

P. El consejo de administración es ahora una representación política, un clon del Parlamento.

R. Total y absoluto. En mi caso, además, es un consejo que no ha sido renovado y su composición responde a la legislatura anterior. Cuando llegué pensé que el consejo iba a ser diferente de la Comisión de Control del Congreso, que ayudaría a dirigir una casa tan complicada como ésta. Sin embargo, me he encontrado con los mismos argumentos que en el Parlamento. La ley cambiará esta situación, sobre todo por la mayoría cualificada que se necesita para su elección.

P. Entiendo que su situación no ha sido cómoda.

R. El consejo de administración tiene un cariz muy politizado. No me ha ayudado a compartir una tarea que es dura.

P. Los consejeros del PP dicen que RTVE está al servicio del Ejecutivo.

R. Dicen eso y muchas otras cosas. Pero no es cierto. Todo el mundo lo sabe, basta con seguir los informativos. Han aprovechado que se aprobaba el proyecto de ley por el Consejo de Ministros para criticar la gestión.

P. Usted heredó una RTVE con audiencias en declive y una deuda galopante, cercana a los 7.000 millones de euros. ¿Es posible así enderezar una empresa?

R. En las mismas circunstancias en las que estamos es evidente que no. Por eso, bienvenida la ley. Va a marcar los límites. Empezando por la propia estructura organizativa. RTVE será una sociedad independiente, con capital público, e integrada por sociedades mercantiles, con presupuestos suficientes y compatibles con los ingresos publicitarios y con la imposibilidad de tener el aval ilimitado del Estado. Ahora es una organización demasiado grande, que ha ido creciendo sin un plan marco.

P. ¿Qué aspectos de la reforma son más novedosos, además del modelo financiero, que viene a cubrir un fracaso histórico?

R. El fracaso estaba ahí. Cuando nacieron los nuevos operadores se debería haber cambiado el modelo. Pero no se hizo. Además de la doble financiación, la reforma crea mecanismos de control a través del Consejo Audiovisual o de los Consejos Asesores. RTVE será independiente del Gobierno, entre otras cosas, porque el mandato del consejo de administración será de seis años para no coincidir con la legislatura. La ley abunda en aquellos contenidos de servicio público que difícilmente otras televisiones van a prestar, especialmente los dirigidos a la infancia o a las minorías.

P. ¿Los consejos informativos serán el elemento clave para la independencia y neutralidad?

R. Son instrumentos para la mayor profesionalidad de los periodistas. Por eso los hemos impulsado en esta etapa.

P. ¿Temió en este año y medio que el Gobierno se inclinara por un modelo que incluyera la privatización de TVE-1?

R. No. Cuando hablé con el presidente del Gobierno vi que quería una radio y una televisión públicas fuertes. Sintonizaba con el proyecto que siempre defendí.

P. ¿En esta etapa de transición habrá reformas en el terreno de la plantilla?

R. Antes de nuestra llegada a RTVE ya se hablaba de un expediente de regulación de empleo. Pienso que no se puede hacer si antes no se sabe hacia dónde vamos. La ley se debatirá en el Parlamento y serán los partidos los que definan el marco estructural de la casa. En función de ese marco se perfilará la subvención, los activos, los contenidos, la plantilla.

P. ¿Cuándo cree que estará operativa la nueva corporación?

R. En torno al próximo marzo. Me gustaría que fuera una ley de consenso, con un gran respaldo político para que el Parlamento devuelva la radio y la televisión pública a los ciudadanos. Sería a un paso de gigante.

P. Las declaraciones de algunos dirigentes del PP no parece que apunten en esa dirección.

R. Si hablamos de una RTVE independiente del poder político, el consenso significaría que todos se lo creen.

P. ¿Llegará el momento en el que TVE no sea un arma electoral?

R. ¿Por que no? Otros países lo han logrado.

P. Usted reúne los requisitos para optar a la dirección general. ¿Lo haría?

R. Yo vine a lo que vine. No lo busqué; me lo encontré. Estoy orgullosa de ser copartícipe de este proceso de cambio. Tengo una gran vocación de servicio público, aunque siempre he trabajado en la Universidad. Y creo que por eso fui valorada.

P. O sea, que Zapatero la llamó para la etapa de transición.

R. Es evidente. Me dijo: "La radiotelevisión pública tiene que ser de los ciudadanos. Empieza a trabajar en la independencia informativa, la pluralidad y nuevos contenidos que recojan todas las sensibilidades". Sabía que estaba en un momento apasionante, el momento del cambio.

P. En otoño tendrá que presentar los presupuestos de 2006. ¿Ha recibido indicaciones del Ministerio de Economía?

R. En principio van a ser continuistas. No podemos variarlos hasta que la ley no se apruebe y el Parlamento no defina la estructura de la compañía.

P. Con la reforma audiovisual, TVE se va encontrar con más competencia.

R. La competencia es siempre buena y cuantas más televisiones haya, mayor capacidad de elección. Soy partidaria de un servicio público potente. El espectador tiene que ser libre y cuanta más información tenga y más plural sea, mejor.

P. Cómo afectará al reparto de audiencia?

R. Ni siquiera se puede hacer un análisis prospectivo. Sería como una quiniela al aire. Nos veremos afectados todos porque se dividirá la tarta publicitaria y tocaremos a un trocito más pequeño. Sabemos cómo con poco dinero se pueden hacer programas de mucha audiencia, pero para RTVE lo importante es ser capaces de formar a la ciudadanía.