Evacuados de Bielsa un centenar de niños alcalaínos

Más de 130 scouts de Alcalá de Henares fueron evacuados el jueves por la Guardia Civil de un campamento en Bielsa (Huesca) por las intensas tormentas. Los acampados tenían permiso del Ayuntamiento, pero la dirección provincial de medio ambiente no autorizó la estancia en la zona, junto a un río, por considerarla peligrosa. A 87 kilómetros de Bielsa está Biescas, donde en 1996 murieron 84 campistas en una riada.

"Prefiero que nos llamen alarmistas a cometer una negligencia. Con 100 niños a tu cargo no se puede arriesgar lo más mínimo, porque nunca pasa nada, hasta que pasa". Así explicaba ayer Juan Manuel Peña, de 31 años y director del campamento, por qué el pasado jueves, a las 17.45, llamó a la Guardia Civil de Bielsa (311 habitantes) para que les evacuase. "El río Cinta, junto al que estábamos acampados empezaba a crecer y veíamos las torrenteras que bajaban por la montaña. Ante la previsión de tormentas a primera hora de la tarde habíamos desmontado las tiendas y cuando se puso feo pedimos ayuda para evitar que algo grave pasara", recuerda Peña.

Cuatro vehículos todoterreno de la Guardia Civil se encargaron de sacar a los 100 chavales -de 6 a 19 años-, 20 monitores y 16 adultos. Los fueron trasladando en varios viajes al pabellón municipal que había cedido el Ayuntamiento de la localidad oscense. "Los niños se lo tomaron como una aventura, un juego y fue más fácil para salir de forma ordenada. No pasaron miedo ni estuvieron en peligro", explica Peña. Según la Guardia Civil, en media hora cayeron 12 litros por metro cuadrado. En pocas horas, en el pabellón del pueblo otro grupo menos numeroso de scouts canarios se unió a ellos. También les habían evacuado por las tormentas.

El alcalde de Bielsa, Antonio Escalona (PSOE), restó ayer importancia al incidente y aseguró que los scouts se habían buscado una excusa "porque habían desmontado el campamento, no tenían donde dormir y querían quedarse en el pabellón". Escalona recordó así el incidente: "Me llamaron a las seis de la tarde porque un campamento había solicitado la evacuación por la crecida del río. Fui a verlo y el río, como siempre, bajaba seco, apenas cayeron 4 o 5 litros por metro cuadrado". Sin embargo, los agentes de la Guardia Civil, que socorrieron al grupo, creen que el desalojo era necesario. "Tras la lluvia, cayó una granizada de un palmo que hubiera reventado las tiendas y los niños se hubieran empapado, hay que prevenir incidentes más gordos, sobre todo con los antecedentes que tenemos", explicó Pedro, uno de los agentes. En agosto de 1996 a 87 kilómetros de Bielsa, en Biescas, murieron 84 personas que estaban en el cámping Las Nieves, a causa de la crecida de un río por las tormentas.

El campamento estaba ubicado en la torrentera seca del río Cinta en un monte que es de propiedad del Ayuntamiento. Según el director del campamento, el Consistorio autorizó el campamento y pagaron por los permisos 3.000 euros para instalarse en esta zona.

Desde el servicio provincial de medio ambiente de Huesca explicaron ayer que, según el decreto de 1997, aunque el propietario del monte sea el Ayuntamiento, los permisos para su explotación debe autorizarlos la dirección provincial de medio ambiente. En este caso, los técnicos desaconsejaron la acampada porque no consideraron segura la zona "Había riesgo de caída de rayos, de caída de ramas y de inundación así que no les autorizamos a acampar", explican desde medio ambiente.

El servicio provincial remitió la resolución a los interesados y a la comarca del Sobrarbe -ente local donde se agrupan todos los municipios de la zona-. Sin embargo, el alcalde aseguró que no sabía que no tuvieran el permiso de medio ambiente. También indicó que sólo cobraron un euro por persona y día.

En el momento de las tormentas había en Bielsa 14 campamentos, pero sólo desalojaron dos: "Había niños pequeños y era mejor no esperar", explicó la Guardia Civil.