La Subdelegación de Guipúzcoa regulariza a la joven boliviana

La Subdelegación del Gobierno en Guipúzcoa ha concedido el permiso de residencia y trabajo a Gabriela Queteguari, la inmigrante boliviana que fue expulsada irregularmente de España y cuyo regreso a cargo del Estado ordenó una juez en febrero para evitar que se viera afectada en su pretensión de regularizar su situación. Otro magistrado anuló a principios de este mes esa repatriación por falta de motivación.

La joven pidió su regularización en mayo, pero la Subdelegación se la denegó alegando que no había presentado los documentos correctos, por lo que consideraba que no quedaba acreditado que estuviese empadronada en España antes del 8 de agosto de 2004, como exigía el Ejecutivo.

El abogado de Queteguari, Iñaki Almandoz, recurrió esta decisión ante la propia Subdelegación, que le ha dado ahora la razón. En su apelación explicaba que la mujer, al solicitar su regularización, adjuntó la documentación requerida y el certificado de empadronamiento por omisión facilitado por el Ayuntamiento de Hondarribia, que se basó en el expediente de expulsión de la joven abierto por la Comisaría de Irún. En él se indicaba que había llegado a España en abril de 2004. De hecho, la policía le incoó dicho expediente porque había rebasado los tres meses que podía estar en el país.