_
_
_
_
Reportaje:

Un mini parque para el gran macizo

La Consejería de Territorio reduce a poco más de 1.000 hectáreas el espacio protegido del Penyagolosa

María Fabra

"La protección del Penyagolosa simboliza la política proteccionista y conservacionista del Consell". Han pasado casi dos años desde que el consejero de Territorio, Rafael Blasco, realizó, con rotundidad, esta afirmación. El hecho es que la oposición de vecinos y propietarios de las tierras afectadas ha provocado que las cerca de 27.000 hectáreas que, en principio, se iban a incluir bajo la declaración de parque natural hayan quedado reducidas a 1.094,45, es decir, alrededor del 4% de lo previsto. Aún así, el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) que se está elaborando sí afecta a las 27.000 hectáreas iniciales. Esto supone que aunque el parque comprenda sólo 1.000 hectáreas, las limitaciones de uso afectarán a toda la zona.

Fuentes de Territorio aseguraron ayer que la decisión de Blasco de reducir notablemente el ámbito de protección no tiene por qué crear un precedente, pese a que la única razón que se esgrime es la oposición, sobre todo, de los propietarios del suelo que se han hecho oír a través de los alcaldes de los municipios afectados, Vistabella, Xodos, Villahermosa del Río y Castillo de Vilamalefa. El motivo principal de rechazo no son sólo las restricciones que implica la declaración de una zona como parque natural sino que, ante éstas, la Generalitat no garantiza contraprestaciones o compensaciones a través de inversiones. Ésta ha sido, de hecho, la principal queja de los rectores de los parques naturales, como el de la Serra d'Irta, que ven cómo la Administración autonómica declara la protección de la zona y "olvida" el resto de obligaciones.

Así, el Grupo para el Estudio y Conservación de los Espacios Naturales (Gecen) ya ha solicitado a Rafael Blasco que amplíe la superficie de declaración de parque natural, es decir de protección, a todo el macizo aunque conscientes de la problemática reclaman también que "potencie las inversiones de tipo ambiental que mejoren la biodiversidad de la zona y que atraigan un turismo ecológico de calidad que beneficie a todos". De hecho, el grupo conservacionista ha instado al consejero a que tenga en cuenta otros parques europeos "donde la creación de un parque natural no se ve como una amenaza sino como un futuro beneficioso para los vecinos".

La pasada semana, el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana publicó el inicio del procedimiento de declaración del Parque Natural del Penyagolosa. Entonces, Blasco sostuvo que "los beneficios de los espacios naturales protegidos para las poblaciones que los albergan no se limitan a la inversión directa de la Generalitat, ya que los parques naturales potencian el desarrollo económico, en especial el de las comarcas de interior, fruto de un turismo sostenible en la naturaleza cada vez más demandado". Sin embargo, estos beneficios parecen no ser tantos a juicio de los vecinos, que percibirán compensaciones económicas si sus tierras están dentro de los límites del parque, según fuentes de la consejería.

Uno de los ayuntamientos que no había puesto pegas a la declaración ha sido el de Llucena que, en principio, estaba afectado por la superficie a proteger. Aún así, y pese al interés por las medidas de protección, la reducción del parque natural ha dejado fuera a este término sin que a su alcalde, el socialista Vicente Nebot, se le haya ofrecido explicación alguna.

En cualquier caso, nadie discute las bondades de este espacio del interior de Castellón caracterizado por su orografía abrupta. El pico del Penyagolosa es, además, la gran montaña emblemática. Su vegetación variada, su rica fauna, la presencia de grandes rapaces diurnas y nocturnas, como el águila real y el águila perdicera, además del gato y la cabra montés y la mayor población valenciana del murciélago troglodita, ya justificaron la consideración del macizo como lugar de interés comunitario (LIC) y zona de especial protección para las aves (ZEPA). Pero el símbolo de la política proteccionista del Consell se ha encogido a 1.000 hectáreas.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_