Una emboscada de la guerrilla de Chechenia causa 14 muertos

Catorce personas perecieron ayer en un ataque de la guerrilla separatista en el norte de Chechenia, una zona poblada principalmente por prorrusos. El hecho ocurrió cuando un jeep de la policía cayó en una emboscada tendida por los independentistas. Los atacantes primero dispararon contra el vehículo y después, cuando llegaron refuerzos policiales, hicieron explotar una bomba que habían colocado en un automóvil. De los 14 muertos, 11 son policías y tres, civiles.

Todo indica que los guerrilleros prepararon muy bien el ataque de Známenskoye, centro del distrito de Nadtérechnoye. Entre los oficiales que perecieron figuran Aslanbek Elmurzáyev, jefe local de la Policía de Investigaciones, y Jizir Minstsáyev, que encabezaba el Departamento de Identificación. Como reconoció el primer ministro de Chechenia, Serguéi Abrámov: "Los mejores oficiales y agentes perecieron en el atentado".

"Los sangrientos hechos perpetrados por los terroristas han provocado la ira de todo el pueblo checheno. Condenamos enérgicamente este atentado y rechazamos la violencia y el terrorismo en todas sus manifestaciones", dijo el presidente prorruso de Chechenia, Alú Aljánov, que declaró duelo nacional para mañana. Entre los civiles que perdieron la vida hay dos adolescentes, uno de 13 y otro de 14 años. Además, la explosión dejó 34 heridos, 20 de los cuales de gravedad.

Aunque los rusos han logrado últimamente una serie de éxitos en su lucha contra los separatistas -el más sonado fue la eliminación del presidente independentista Aslán Masjádov en marzo pasado-, la guerrilla todavía tiene capacidad para lanzar ataques sorprendentes, como demuestra la operación de ayer.