El Parlament aumentará su control sobre el Gobierno

El futuro reglamento del Parlament agilizará la actividad legislativa e incrementará el control de la oposición sobre el Gobierno autónomo. La ponencia cerró ayer la segunda lectura de la propuesta de reforma, que garantiza las comparecencias del presidente de la Generalitat para someterse a las preguntas de la oposición. El texto, además, acorta los plazos de algunos trámites parlamentarios y rebaja los requisitos para solicitar una comisión de investigación.

Los grupos esperarán a la aprobación del Estatut en comisión, pues afecta a algunos artículos del nuevo reglamento, antes de volver a reunirse en ponencia el próximo 6 de septiembre. La pretensión de los partidos es que el nuevo reglamento entre en vigor el 1 de enero de 2006.El actual reglamento, vigente desde 1980, dificulta la creación de comisiones de investigación, ya que deben ser aprobadas por mayoría del pleno o bloqueadas por la Mesa. El texto que han elaborado los grupos en la ponencia elimina dichas trabas. La Cámara tendrá que crear una comisión de investigación si así lo solicitan tres grupos parlamentarios o una tercera parte de los 135 diputados que ocupan el hemiciclo. Esta medida permitiría a Convergència i Unió (CiU), con 46 diputados, forzar una comisión de este tipo, aunque este recurso sólo podrá utilizarse una vez al año.

La propuesta abre la puerta al llamado "voto delegado", por el cual los diputados podrían ejercer su derecho al voto aun sin estar presentes en el hemiciclo, delegando esta responsabilidad en un compañero de partido. Esta posibilidad sólo se contempla por razones de "fuerza mayor", como enfermedad grave o embarazo. En todo caso, la ausencia deberá comunicarse con antelación y será la Mesa del Parlament la que decida en cada caso.

El futuro reglamento introduce cambios en la labor de los diputados, que verán recortadas sus vacaciones a la mitad, y por tanto se amplía el periodo de sesiones. Al contrario de lo que sucede ahora, los parlamentarios deberán trabajar también la segunda quincena de enero y durante todo el mes de julio. Además, un diputado no podrá ser excluido temporalmente de sus funciones por mayoría absoluta del pleno del Parlamento como ocurre en la actualidad, sino que se requerirá una mayoría de dos tercios.

Enmiendas de CiU y el PP

A pesar de que los partidos cerraron ayer en el Parlament la segunda lectura de la reforma, todavía podrán introducirse cambios. Los tres grupos del tripartito (PSC, ERC e ICV) están de acuerdo en la práctica totalidad de los artículos. Sin embargo, los partidos de la oposición, CiU y el PP, presentarán enmiendas. Los populares pretenden disponer de más tiempo para intervenir durante las sesiones de control. Por su parte, los convergentes aspiran a que el presidente de la Generalitat deba someterse a las interpelaciones de los grupos. Otra novedad del reglamento es que, en los debates de política general, después de la intervención del presidente podrán participar otros miembros del Gobierno.

La ponencia se volverá a reunir, ya de forma definitiva, el próximo 6 de septiembre. La intención de los grupos es esperar a la aprobación del Estatut, que afecta a dos artículos del reglamento, uno sobre la autodisolución del Parlament y otro sobre control y validación de los decretos ley.