El líder del Polisario critica el "silencio" del PSOE sobre el Sáhara

Al tercer día de su visita a España, Mohamed Abdelaziz, el líder del Frente Polisario, se destapó. Arremetió ayer con dureza contra el Ejecutivo español y el PSOE por no haber condenado la "brutal represión" de Rabat en el Sáhara Occidental. "No consideramos aceptable la posición del Gobierno actual ni la de ningún partido político que observe en silencio estas prácticas inadmisibles", afirmó en el Foro Nueva Economía en el hotel Palace.

El secretario general del Polisario se refería al mutismo del Ejecutivo y del PSOE frente a la irrupción sin permiso, el lunes pasado, de 15 policías marroquíes en un edificio del Estado español en El Aaiún, que no goza de extraterritorialidad, para detener al independentista saharaui Hamad Hamad, de 45 años. También aludía a la expulsión de la capital del Sáhara de cinco delegaciones parlamentarias o municipales españolas.

Tenía, por último, en mente el juicio de 16 de los manifestantes de mayo, acusados de "participación en concentración armada", que concluyó ayer en El Aaiún. Hace dos semanas, el tribunal de apelación de la ciudad ya había condenado a otros tres jóvenes saharauis, que tomaron parte en las protestas, a entre 15 y 20 años de cárcel. Las sentencias no suscitaron ninguna reacción de las autoridades españolas.

Este aluvión de críticas provocó una réplica del socialista José María Benegas, vicepresidente de la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso, que se encontraba entre los asistentes al acto. "Comprendo la indignación de un representante del pueblo saharaui (...)", respondió Benegas, pero "no es cierto que el Gobierno de España no esté haciendo nada". "Podrá ser insuficiente, pero sí se está haciendo". "Ha habido protestas", recalcó.

El Gobierno y el PSOE nunca han protestado por las condenas. El ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, sí ha "lamentado", en cambio, la expulsión de delegaciones a las que su director de gabinete, Javier Sancho, pidió por escrito que renunciasen al viaje. La diplomacia española también instó, por último, el lunes a Rabat a que aplique las normas del Estado de derecho al independentista Hamad.

Benegas concluyó su intervención dejando de lado las cautelas con las que los responsables de su partido evocan el futuro del Sáhara. "Le deseo mucha suerte y que su pueblo pueda tener algún día un Estado independiente", enfatizó.

A primera hora de la noche el titular de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, hizo una declaración a la agencia Efe para contestar a Abdelaziz. Nadie puede dudar, dijo, "del mensaje firme y sostenido" del Ejecutivo ante Marruecos en favor de los derechos humanos en el Sáhara Occidental.

Cuando faltan 12 días para que se reabra, en Bruselas, la negociación pesquera entre Marruecos y la Unión Europea, el jefe saharaui hizo un llamamiento a los 25 para que no suscriban un tratado con Rabat del que se beneficiaría, principalmente, España. "Europa no puede firmar acuerdos de pesca que afecten a la soberanía del Sáhara porque se violaría así la legalidad internacional", subrayó.

El Polisario considera que Marruecos no tiene jurisdicción sobre las aguas del Sáhara pero nunca ha pedido a los Estados que le respaldan que soliciten a la asesoría jurídica de Naciones Unidas o al Tribunal Internacional de Justicia un dictamen sobre a quién pertenecen esos recursos pesqueros. "Es una iniciativa que podemos estudiar", contestó evasivo Abdelaziz.