Del amor en la guerra

Un valioso jarrón que se rompe y una conversación escuchada de forma fortuita enmarcan para la pequeña Briony un acontecimiento cuyas consecuencias deberá sobrellevar toda su vida. Es el verano de 1935 en una elegante casa de campo británica. Y es ahí donde empieza el envolvente relato de esta niña de 13 años, una historia sobre cómo se cuenta una historia.

Ian McEwan (Aldershot, Reino Unido, 1948) logró con Expiación no sólo el reconocimiento de la crítica internacional como uno de los maestros de la narrativa actual, sino un gran éxito de ventas. Es, ante todo, una gran novela de nuestro tiempo. Una novela de amor y de guerra, pero también una reflexión sobre la literatura y sobre el siglo XX. Escrita con todos los recursos de la narrativa actual, rescata el género de su supuesta agonía a través de unos personajes polifacéticos, trazados con emocionante profundidad, y de unas situaciones intensas que permiten ahondar en temas como el arrepentimiento, el horror de la guerra o la fragilidad de la vida y del amor. Los escenarios también están magistralmente relatados. La segunda parte de Expiación transcurre en el norte de Francia, durante el retroceso de las tropas inglesas ante el avance nazi en la Segunda Guerra Mundial, y la tercera, en un hospital londinense cuando comienzan a llegar los heridos del frente. Pero la magia cobra efecto al final de esta obra, cuando ya es demasiado tarde para casi todo.