Detenidos cuatro sospechosos de matar de un disparo a un joyero de Móstoles durante un atraco

Justo un día después de que un millar de joyeros y pequeños comerciantes se manifestaran para reclamar medidas para frenar la delincuencia que padecen, agentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, en colaboración con sus homólogos de Cataluña, desmantelaron una banda de ladrones de joyerías, formada por extranjeros de origen dominicano y peruano, a los que se les imputa al menos cuatro atracos en distintos puntos de la región. Entre los arrestados se halla R. C. F., de 36 años, al que la policía considera autor del disparo que acabó con la vida del joyero de Móstoles Antonio Sancho Arevalillo, de 54 años, el pasado día 16 de junio.

Las detenciones se produjeron a lo largo del día de ayer, tras conseguir los preceptivos mandamientos judiciales, según fuentes policiales. Las investigaciones las han realizado agentes de la Sección I, dedicada a Delincuencia Internacional, y la Sección de Homicidios, ambas pertenecientes a la Brigada Provincial de Policía Judicial.

Los arrestos se produjeron en Barcelona. Según algunas fuentes policiales, los detenidos forman un grupo itinerante que se dedicaba a cometer atracos en Madrid y en Barcelona. Los detenidos son tres hombres y una mujer que portaban documentación uruguaya. Pero los investigadores descartan que sean originarios de este país suramericano. Las primeras pesquisas apuntan a que proceden de Perú y la República Dominicana.Los policías practicaron ayer por la tarde diversos registros en los pisos de la banda. El más importante fue efectuado en la localidad barcelonesa de L?Hospitalet del Llobregat, donde fueron localizadas dos armas de fuego (supuestamente pistolas), además de documentación, varios teléfonos móviles y piezas de joyería y bisutería. Los registros no han permitido recuperar la escopeta con los cañones recortados con la que fue disparado el empresario de Móstoles, según fuentes del caso.

Los otros tres detenidos son J. M. J. V., de 20 años; M. F. C., de 30, y M. P. S., de 36. Fuentes de la investigación destacaron que aún quedaba algún integrante de este grupo delictivo por detener, que podría ser arrestado en las próximas horas. La policía imputa al supuesto homicida, R. C. F., otros dos robos, perpetrados en la Joyería Sainero, en el número 31 de la calle de Pelícano (distrito de Carabanchel), y en la tienda de bisutería Alonso, en la calle de Joaquín Turia número 15. La banda tiene imputado también un atraco en Fuenlabrada.

Los policías interrogaron ayer a los detenidos. Uno de ellos sólo reconoce haber participado en dos de los cuatro atracos que les son imputados por los agentes. Este arrestado aseguró en su declaración que no había participado en el atraco a la joyería de Móstoles, pero culpó a otro integrante de la banda.

Otro de los cuatro detenidos también imputó el homicidio de Sancho Arevalillo a otro integrante de la banda. Los arrestados serán trasladados previsiblemente a lo largo del día de hoy a la Jefatura Superior de Policía de Madrid, después de que el titular del juzgado de Barcelona que instruye las diligencias del arresto se inhiba a favor del magistrado de Móstoles que conoce las diligencias de la muerte del empresario.

El homicidio de Sancho Arevalillo se produjo a las 19.35 del pasado 9 de junio, cuando el empresario estaba en su local, en el número 18 de la calle de Felipe II, junto a un hijo y a una dependienta. Tres hombres con acento suramericano irrumpieron en su tienda y obligaron a los empleados a que se fueran a la trastienda. El dueño les dijo que estaban siendo grabados por una cámara de seguridad.

Disparo a bocajarro

Fue en ese momento cuando recibió un disparo a quemarropa por la espalda, causándole una enorme herida. Después le arrebataron parte de las joyas que había en los expositores de la tienda. Su precipitación y nerviosismo hicieron que parte de las alhajas quedaran tiradas por el suelo. Eso sí, tuvieron tiempo de hacerse con la cinta de vídeo de la cámara.

Los joyeros de la región han sufrido 10 atracos en lo que va de mes y suman unos 40 en lo que va de año, según datos del Gremio de Joyeros y Plateros, que ha pedido mayor vigilancia policial para frenar la inseguridad que sufren.