Muere una niña de 10 años en un incendio en Sabadell

Un niña de 10 años murió ayer hacia las cuatro de la madrugada al arder el piso en que vivía con su madre, en la última planta del inmueble número 17 de la calle de Archidona, en el barrio de Can Puiggener de Sabadell. La niña murió a causa de la inhalación de humo. Cuando llegaron los bomberos ya la encontraron muerta sobre la cama, aunque no tenía ninguna quemadura. Las circunstancias que originaron el incendio permanecían ayer confusas, así como la actuación de la madre, que fue vista en el balcón de la casa cuando se iniciaba el fuego.

Seis vehículos de los bomberos llegaron al lugar del siniestro hacia las 4.20 horas, pero el fuego se había extendido muy rápidamente. Fueron los vecinos quienes alertaron a los bomberos de que en el interior de la vivienda había aún una niña. Según una portavoz de la Dirección General de Emergencias y Seguridad Civil de la Generalitat, la puerta del piso estaba cerrada y fue necesario reventarla para entrar. El fuego era muy virulento y no se veía absolutamente nada, por lo que los bomberos tuvieron que avanzar prácticamente a tientas. Buscaron en las habitaciones, pero cuando llegaron a donde dormía la niña, ésta ya había muerto por inhalación de humo.

La madre, Encarnación P. G., de 36 años, estaba en la calle en el momento en que llegaron los bomberos. El joven que les había avisado, Jordi Castillo, declaró que había visto a la mujer en el balcón de la casa poco antes de que las llamas devorasen la vivienda. El muchacho explicó que había ido a acompañar a su novia al portal del número 24 y que, al ver un "pequeño resplandor" a través del balcón, le preguntó a la mujer si ocurría algo. Ella le respondió que le parecía que le había caído un cigarrillo en el colchón.

El joven no le dio importancia pues creyó que la mujer lo tenía controlado. Pero al poco vio que las persianas habían sido bajadas y oyó una explosión. Fue entonces cuando avisó a los bomberos. Cuando éstos llegaron, encontraron a la mujer fuera de la vivienda, pero tuvo que ser atendida por los servicios sanitarios, pues había resultado intoxicada por el humo. El fuego había adquirido gran virulencia. Después de rescatar el cuerpo de la niña, los bomberos apenas tardaron media hora en apagar el incendio. La vivienda quedó totalmente destruida.

Si un cigarrillo fue o no la causa del siniestro es un interrogante que ayer no obtuvo respuesta. Por la mañana, agentes de la policía científica inspeccionaron el piso para determinar la causa de fuego. Médicos forenses realizarán una autopsia a la niña para determinar las causas exactas de su muerte.

Ayer el barrio de Can Puiggener estaba conmocionado. Los viandantes escudriñaban las ventanas ennegrecidas del piso número cuatro. Según Jordi Castillo, los vecinos intentaron entrar en el piso para rescatar a la niña, pero fue imposible. "Oíamos los gritos de la niña e intentamos entrar, pero había mucho humo, el techo se caía y no se veía nada", explicaba.

Una de las vecinas que fue desalojada por los bomberos relató ayer que "se veía una densa columna de fuego que salía del comedor; era un fuego muy vivo". Agentes del Cuerpo Nacional de Policía evacuaron a los vecinos, según la misma mujer, pasadas las cuatro de la madrugada: "Empezaron a llamar a los timbres diciendo que saliésemos y bajáramos a la calle". Dos horas después los vecinos volvían a sus casas, ya que el fuego no afectó a la estructura del edificio ni a los otros tres pisos del inmueble.