El consorcio vasco acude a un tribunal internacional para defender su negocio en Uruguay

Uragua, el consorcio de empresas vascas participado por la eléctrica Iberdrola (49% del capital), la BBK (25%), la SPRI (13%) y el Consorcio de Aguas Bilbao-Bizkaia (13%), ha recurrido a un tribunal internacional para solventar el contrato del servicio de agua en Uruguay. El gerente del Consorcio, Pedro Barreiro, señaló ayer que esta vía se une a la planteada en los tribunales del país sudamericano, en la que Uragua ha reclamado a la Administración de ese país una indemnización de 24 millones de dólares (cerca de 20 millones de euros al cambio actual).

Barreiro explicó ante la asamblea general de la entidad de aguas las últimas vicisitudes del negocio del saneamiento y abastecimiento de agua en las zonas turísticas uruguayas de Punta del Este, Maldonado y Piriápolis, donde presta este servicio desde 2000. La llamada "aventura americana" entró en crisis dos años más tarde con la recesión económica de Uruguay, lo que llevó a las empresas vascas a plantearse su salida del negocio. El proceso de venta no tuvo éxito, pero en octubre pasado se aprobó un referéndum en Uruguay para que los servicios como el agua fuesen gestionados por empresas públicas.

Desde entonces, Uragua ha reclamado la rescisión con la correspondiente indemnización, que hace dos meses presentó formalmente al Gobierno uruguayo (24 millones de dólares), según preció Barreiro.

Contactos

El gerente detalló los contactos mantenidos con el Ejecutivo de ese país, el último el 14 de abril, para buscar "una salida negociada", pero sin éxito. Añadió que, además del recurso a los tribunales de este país, cuyo primer paso será una vista de conciliación a finales de mes, se ha recurrido a la vía internacional. Desde 1992 existe un tratado entre España y Uruguay sobre las inversiones recíprocas que posibilita el inicio del denominado proceso de controversia internacional.

Esta vía se prolongará, si no hay acuerdo previo, varios años. El gerente de la entidad de aguas habló de un plazo inicial de dos años, al que puede seguir otra fase más con la mediación de otro organismo internacional dependiente de Banco Central Europeo. Barreiro, quien informó de que el pasado 1 de junio la Administración uruguaya rescindió el contrato de concesión acusando de incumplimientos a la empresa vasca, afirmó que Uragua seguirá prestando el servicio "durante unos meses".

El presidente del Consorcio de Aguas, Ibon Areso, se mostró confiado en la recuperación de la inversión de todos los socios, cifrada ahora en 14,7 millones de euros. "Si todo va bien tendremos algunos beneficios", dijo.

De momento, el consorcio vizcaíno de aguas anunció que ha realizado una provisión de fondos en Uragua de 1,6 millones, que rechazó calificar de pérdidas. "Se ha hecho por prudencia contable", explicó.