Aguirre asegura que 375.000 mayores reciben algún tipo de atención de los servicios sociales de la región

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, organizó ayer un acto al que acudieron varios cientos de ancianos y en el que aprovechó para ofrecer datos sobre la marcha de las políticas sociales que su Gobierno está llevando a cabo respecto a los mayores.

Aguirre aseguró que un total de 375.000 mayores de los 600.000 que viven en la Comunidad de Madrid son usuarios de los servicios sociales dependientes del Gobierno regional. "Además, hay 56.000 familias madrileñas con mayores a su cargo que reciben el apoyo del Ejecutivo regional", manifestó la presidenta.Según los datos ofrecidos por la Comunidad, el número de plazas en residencias para mayores "se eleva a 16.800, lo que supone 1.300 más de las previstas, y el número de usuarios de la ayuda a domicilio, que la Comunidad había estimado en 29.000, se ha extendido a más de 41.000". Según la presidenta regional, el 45% del presupuesto de la Consejería de Familia y Asuntos Sociales se destina a atender a los mayores.

Aguirre expresó su intención de que los mayores residentes en la Comunidad se muestren activos e ilusionados. Y así relató las múltiples actividades que se ofrecen en los centros de mayores, como baile, coros, cursos de taichi e incluso de risoterapia. Precisamente esta última disciplina fue la que propició la anécdota del acto: la presidenta se dirigió a la consejera de Familia y Asuntos Sociales, Beatriz Elorriaga, y le dijo: "Consejera, anota que me tienes que apuntar a mí a uno de esos cursos de risoterapia".

En el acto intervinieron también el presidente de la Asociación de Pensionistas y Jubilados de Endesa y vicepresidente de la Federación de Jubilados de Empresas Eléctricas, José Hernando; la presidenta de la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer y otras Enfermedades Neurodegenerativas Asociadas a la Edad, Ana Rosa Sáenz de Buruaga, y la directora de la Residencia Getafe Alzheimer, Laura Fernández.

El showman y presentador de televisión Javier Capitán fue el encargado de moderar el acto y lo hizo con su propia voz y, otras veces, imitando al ex presidente del Gobierno José María Aznar, al futbolista Alfredo di Stéfano y al ex presidente de la Generalitat Jordi Pujol. Durante el acto, una mujer sufrió una caída y tuvo que ser atendida por facultativos del Samur-Protección Civil.